Muchos coincidimos que el diseño todavía suele ser considerado solo para algunos. Por eso debemos preguntarnos qué es lo verdaderamente democrático aquí en el asunto del diseño - y desde este lugar podemos ayudar a definir y aportar nuestra visión hacia una sociedad más justa. Desde la perspectiva de la arquitectura y el urbanismo, podemos mirar esta democratización desde diferentes ángulos, incluyendo a los ciudadanos en los procesos participativos ya que son los que mejor conocen sus necesidades diarias y proyectando de manera más inclusiva nuestras ciudades. En la base de todo esto se encuentra, buscar urgentemente respuestas para mejorar la habitabilidad y accesibilidad en las vidas de las personas.