En los últimos días, la Unidad Administrativa Especial de Catastro Distrital de Bogotá reveló un completo análisis sobre el estado actual de las dinámicas inmobiliarias en la capital colombiana. Sus resultados llamaron especialmente la atención al evidenciar el veloz crecimiento que ha sufrido en los últimos ocho años, llegando a igualar en superficie el área de Suba y Usaquén juntas, alrededor de unos 69 millones de metros cuadrados. Si bien Cartagena y Bogotá están desde hace años a la par, en términos de crecimiento urbano, ha quedado claro que Bogotá sigue consolidándose como el mayor atractivo inmobiliario de Colombia.
Hasta la fecha, se avalúa a Bogotá, con la totalidad de sus 2,4 millones de predios, en 479 billones de pesos colombianos (USD 149.000 millones); 23 billones más de lo estimado en el 2015. Lo que indica que se incorporaron 57.185 predios nuevos a Catastro, con un valor inmobiliario que aumentó un 288%. Con una reducción del tamaño promedio de los predios en un 18%, se evidencia la disminución en la disponibilidad de espacio urbano y su directa relación con el encarecimiento del metro cuadrado.
La expansión de la ciudad y la desprolija densificación en su interior, produce una importante afectación en las dinámicas inmobiliarias. Por medio del siguiente análisis fue posible categorizar estos comportamientos en tres grandes grupos: reconversión de usos, nueva área construida e incremento en los avalúos catastrales.