La historia de las ciudades impregna sus calles, todo tránsito deja su huella, y las calles de México han aprendido a dar lugar a una gran variedad de pasos, pero aún con el frenesí urbano de hoy en día y los movimientos interminables de sus habitantes, sus calles llevan treinta años dando cuenta de lo que sucedió una mañana de septiembre en 1985 tan fielmente como si aquel acontecimiento hubiese sido el único por contar. A las 7:15 de la mañana, el 19 de septiembre de 1985, México se vio sacudido por el sismo más intenso de su historia, de 8.1 grados en escala de Richter y con epicentro en las costas de Michoacán, sus secuelas no solo agrietaron los pavimentos de las banquetas en la ciudad de México; sacudieron la realidad mexicana desde sus profundidades y reorganizaron la manera de vivir la ciudad.
Hoy, 19 de septiembre pero treinta años después, nos unimos con estas palabras a la conmemoración del aniversario 30 del Terremoto del '85 en México.