A nadie sorprende que a la fecha la industria del cine recurra continuamente a la adaptación de libros juveniles. Dicha tendencia ha creado trabajos muy dispares en cuanto a calidad, lo cual ha creado cierto escepticismo en el grueso del público y la crítica. “The Maze Runner”, siguiendo las pautas de esta tendencia sobresale por mostrarnos una historia, que aunque simple, está plagada por matices retorcidos, analogías poderosas de nuestra propia realidad y ambientadas dentro de una arquitectura opresiva y asfixiante.
“The Maze Runner” tiene como protagonista, más allá de los personajes humanos, a la figura del laberinto, que desde la antigüedad ha sido dotado de múltiples significados. Simboliza confusión, desesperanza, misterio, y de la misma manera que intimida y aleja a todo aquel que lo contemple, es también un elemento de gran atracción que invita a la exploración, a perderse entre sus más profundos rincones.