
Los efectos producidos por el tránsito del tiempo sobre las ciudades dejan complejos rastros de una historia que sedimenta en la fotografía parte de nuestra memoria. Laura Sáenz y Simón Fique, arquitectos bogotanos, han emprendido una investigación que pretende reconstruir, por medio del registro fotográfico, las transformaciones arquitectónicas y espaciales de Bogotá.
Bajo el nombre de "Espacio y alteridad: la imagen de Bogotá a través del tiempo", este proyecto parte de la identificación de la capital colombiana como una de las más importantes en Latinoamérica, y gracias al prolífico patrimonio visual y artístico, es posible comprender el reconocimiento de la presurosa mutación que sufrió después de la época de la violencia, a mediados del siglo XX.