En contextos donde las disputas políticas y económicas se abordan mediante conflictos armados y por ende mediante la destrucción territorial, las nuevas tecnologías surgen como una solución, brindándonos una oportunidad única para reconstruir las ciudades devastadas de una manera más equilibrada. Si bien el mundo ya ha llevado adelante numerosos intentos fallidos para reconstruir ciudades arrasadas por la guerra, el siglo XXI promete mejores oportunidades, con herramientas que contemplan variables asociadas a la cultura del lugar, la integración y la sostenibilidad.
Las nuevas tecnologías están transformando poco a poco la forma en que vivimos y también la forma en que diseñamos y construimos nuestros edificios y ciudades. Con la inevitable incorporación de la Inteligencia Artificial en nuestros procesos de diseño y construcción, la industria de la arquitectura nunca volverá a ser la misma. Estas innovaciones transformarán para siempre el entorno en el que vivimos, y especialmente la forma en que nos relacionamos con los demás. Capaz de transformar nuestros modos de vivir, la IA también puede ayudar a proyectar la mejor versión del entorno que se ha perdido.