Material liviano por excelencia, el Zinc es un metal no ferroso que entrega una solución efectiva para revestir edificios expuestos a condiciones climáticas adversas, entregando, a su vez, respuestas creativas a los requerimientos del mandante y los usuarios del proyecto.
Al entrar en contacto con la humedad, los paneles de Zinc generan una capa que le permite auto-protegerse, aislando el calor de los espacios interiores durante el verano, y respondiendo correctamente a la lluvia y a la nieve durante el invierno, al deslizarse fácilmente sobre sus superficies. Sus paneles modulares pueden 'envolver' formas curvas o perforarse según el diseño arquitectónico, y combinarse en fachadas y/o techos a través de distintos tonos, brillos y colores.