Calificado como la peor catástrofe natural de Nepal desde 1934, el terremoto de 7,9 grados en escala Richter con epicentro a 150 kilómetros al oeste de Katmandú, lleva un registro de 3.900 muertos y 7.180 heridos, según informó Al Jazeera al momento de publicarse este artículo.
Mientras las agencias internacionales preparan operaciones masivas de asistencia humanitaria, ya es un hecho que gran parte del patrimonio cultural de una de las naciones más pobres de Asia ha quedado en los suelos e incluso se inician catastros de supervivientes en pueblos de hasta 1.000 personas totalmente destruidos, según informa la BBC.
En esa línea, un dron del Ejército local sobrevoló Katmandú, la capital de Nepal, registrando las tareas de rescate de brigadistas y el estado de destrucción de construcciones históricas, como la torre Dharahara, histórica construcción del siglo 19 reducida a escombros.