Tal vez la mayor fiesta brasileña, el carnaval es celebrado con mucha intensidad en toda América Latina a través de marchinhas (género musical propio del carnaval), blocos en la calle, carros alegóricos, desfiles, y por supuesto, disfraces, conocidos en Brasil como fantasías.
Ya sea simple y discreto, o sofisticado y extravagante, el disfraz es un dispositivo que permite a aquel que lo viste (y también a aquel que lo ve) imaginar que no existe. De cierto modo, el disfraz es la materialización de nuestros sueños. En el carnaval y en otras festividades, el significado del disfraz se expande, y a través de él las personas se divierten convirtiéndose en lo que no son, o en lo que les gustaría ser.