Cuando abordamos los problemas más amplios del mundo (como la emergencia climática, la crisis energética y la escasez de viviendas), a menudo buscamos soluciones radicales y grandiosas que puedan abordarlos todos a la vez. Por muy atractivas que puedan ser estas ideas, eventualmente se topan con las miles de complejidades e interconexiones que presenta nuestro mundo. Pero ¿y si buscamos soluciones más descentralizadas y domésticas? La firma Tom Bassett-Dilley Architects, con sede en Chicago, ha estado persiguiendo precisamente esto, enfocándose en diseño sustentable, proyectos libres de carbono y energéticamente eficientes para residencias, edificios históricos, instituciones y proyectos comerciales. En su Manifiesto: The New American Dwelling, sostienen que la vivienda unifamiliar, que alguna vez fue el gran sueño americano, debe redefinirse para enfatizar el minimalismo, la eficiencia, la salud, la conexión con la naturaleza, la durabilidad y la bondad personal, alejándose de las prácticas derrochadoras, artificiales y tóxicas. Hablamos con Tom Bassett-Dilley, FAIA, CPHC, LFA y fundador de la firma, sobre algunos aspectos de su trabajo.
Diseño Pasivo: Las más recientes noticias y obras de arquitectura
Diseñar en conexión con la naturaleza: una entrevista con Tom Bassett-Dilley sobre arquitectura sostenible y saludable
MVRDV y GRAS completan la primera fase del Proyecto Gomila en Mallorca, España
MVRDV y GRAS anunciaron la finalización de cinco de los siete edificios del Proyecto Gomila en Palma de Mallorca, España. El conjunto residencial estaba compuesto originalmente por cuatro edificios existentes, a los que se han sumado tres nuevos para un total de 60 viviendas nuevas y nuevos espacios comerciales. El proyecto se alinea con la renovación del barrio histórico "El Terreno" como un sitio residencial vibrante y sostenible, hogar de clubes nocturnos bohemios que acogieron a músicos icónicos como Jimi Hendrix, Ray Charles y Tom Jones.
Energía geotérmica: uso del calor de la tierra para calentar edificios y generar electricidad
A diferencia del aire, la temperatura del subsuelo varía muy poco durante el año o según la posición geográfica. Unos pocos metros por debajo de la superficie, la temperatura del suelo oscila entre 10 y 21 °C (50 y 70 °F), según la región. Excavando más profundo, la temperatura aumenta entre 20 y 40 grados centígrados por km, alcanzando el núcleo de la Tierra, que se acerca a los 5000 °C. De hecho, pensar en cómo habitamos una esfera que orbita el espacio con un centro resplandeciente puede resultar angustiante para algunos. Sin embargo, puede ser útil saber que usar la energía de formación de la Tierra para generar electricidad es una forma sostenible y eficiente que ya es común en algunos países. Al mismo tiempo, también podemos aprovechar la temperatura suave que se encuentra a pocos metros bajo tierra para climatizar los edificios, ya sea en climas cálidos o fríos.
¿Qué podemos aprender sobre el Carbono Cero a partir del trabajo de João Filgueiras Lima?
La política de Carbono Cero tiene como objetivo crear una especie de equilibrio ecológico para neutralizar la emisión de gases de efecto invernadero. Varios estudios reportan que el sector de la construcción civil es uno de los principales responsables del desequilibrio en el que nos encontramos actualmente, al fin y al cabo consume recursos naturales a escala gigantesca y sigue construyendo edificaciones que no colaboran con el mantenimiento del medio ambiente. Por lo tanto, buscar caminos hacia una arquitectura neutra en carbono se ha vuelto fundamental y uno de ellos es aprender de los maestros del pasado, como el arquitecto brasileño João Filgueiras Lima, conocido como Lelé.
Hotel de Turismo de Eldorado: La sombra como aproximación a una estética medioambiental
El contexto global de crisis energética y ecológica ha hecho que, desde hace varios años, estos temas se empiecen a hacer eco en varias disciplinas. La arquitectura no ha quedado al margen de ello. Es entonces cuando aparece el interrogante acerca de qué aportan nuestros edificios para contribuir en la mitigación de estos problemas. En este contexto, invadieron la escena global de producción arquitectónica edificios que atienden al problema con una alta dependencia tecnológica. Con el objetivo de atender los problemas del ambiente hay quienes olvidaron que la arquitectura puede asumirlos en una respuesta sintética, a través del entendimiento del lugar y la manipulación de la forma, la materia y la energía.