Es fácil pensar en el sector inmobiliario como el conocido 'mundo de hombres'. Superficialmente, parecería ser una industria de relaciones de poder y venta agresiva, en la que el éxito proviene aparentemente de figuras masculinas y los ascensos corresponden a los miembros masculinos de círculos selectos.
Pero esta percepción del sector inmobiliario como coto privado para hombres necesita cambiar con urgencia, según Carmen Panadero —codirectora de la IE School of Architecture and Design’s Master in Real Estate Development y ganadora del premio IE’s Woman of the Month (Mayo 2015)—, quien insiste en dotar de más visibilidad a la mujer en una industria en la que el techo de cristal no es tan invisible.
"No estoy hablando de discriminación positiva", explica. "No quiero que alguien me dé un trabajo simplemente porque soy una mujer y hay un cupo que cubrir. Pero si quien toma las decisiones tiene que elegir a alguien para un puesto de relevancia o para trabajar con un cliente importante, suele inclinarse por alguien a quien conoce bien. Así es simplemente cómo funcionan los seres humanos", agrega.
Teniendo en cuenta que los contactos son un factor tan importante en cualquier negocio, Panadero argumenta que muchas oportunidades van a parar a los hombres porque son miembros del mismo club privado.
Panadero, que también es directora de desarrollo de servicios en CBRE España, indica que la baja visibilidad de las mujeres en el sector inmobiliario se hace más evidente cuando participa en eventos de esta industria en todo el mundo. "Hay simplemente menos mujeres a nivel directivo. A veces, en un gran evento del sector inmobiliario puede que solo se vea a dos mujeres en toda la sala", explican.
De hecho, los estudios muestran que las mujeres desempeñan en todo el mundo un número de puestos de liderazgo desproporcionadamente bajo, no solo en el sector inmobiliario, sino en todos los sectores. Solo un 22% de los puestos directivos en el mundo corresponden a mujeres, y un 32% de las empresas trabajan sin una sola mujer en su directiva. Y todavía hay más, la brecha salarial sigue existiendo en todos los sectores. En España, las mujeres ganan, de media, un 24% menos que los hombres en los mismos puestos a jornada completa.
Esta desigualdad se nota especialmente en el sector inmobiliario, que continúa estando dominado por los hombres. Panadero pretendía cambiar todo esto cuando fundó WIRES (Women in Real Estate Spain). El objetivo del grupo es dar visibilidad a las profesionales femeninas del sector inmobiliario, que por fin están empezando a romper las históricas barreras de género en el sector.
“WIRES aparece en un momento de cambio en el sector, puesto que se está luchando por superar las consecuencias de la burbuja inmobiliaria”, explica Panadero. “Nuestro propósito es ayudar a fortalecer y consolidar estos cambios”. Lo hacen principalmente promocionando la presencia de las profesionales femeninas en el sector inmobiliario, aumentando así la igualdad y la diversidad de género, lo que solo puede beneficiar a la evolución de esta industria.
“Cuando organizamos un evento, sentamos a la gente de forma alterna, hombre-mujer-hombre-mujer. Se trata de diversidad", dice Panadero, quien anima a las mujeres de todos los ámbitos a no dejarse intimidar por una industria dominada por hombres, sino a ser conscientes de las virtudes del toque femenino.
"Las mujeres suelen tener una forma de trabajar muy diferente", explica. "Un estilo de gestión más prudente, se podría decir, con un mayor énfasis en la investigación y la preparación. Y en una negociación difícil, esto solo puede ser ventajoso".
Un estudio reciente de la Universidad de Tel Aviv confirma este punto de vista tras determinar que las mujeres negocian tan bien como los hombres, e incluso mejor cuando alcanzan acuerdos en nombre de personas que les importan.
La postura de Panadero cobró todavía más fuerza cuando conoció a un importante director en un evento internacional que le dijo que gestionaba un departamento integrado casi exclusivamente por mujeres que negociaban la adquisición de deuda, con una tasa de éxito superior a la de sus homólogos masculinos y añade:
Tienes que entrar en una negociación difícil con un buen entendimiento de lo que puedes ganar y lo que puedes perder, así como de lo que la otra parte puede ganar y perder. Las mujeres suelen trabajar centrándose la conciliación, por lo que crean las condiciones adecuadas para lograr un acuerdo inmejorable
Carmen Panadero es codirectora del Master in Real Estate Development (MRED) en la IE School of Architecture and Design.
