Diseñada en 1928 por Ludwig Mies van der Rohe y su compañera Lilly Reich, la Silla Barcelona fue creada como mobiliario para una de las principales obras del arquitecto; el Pabellón Alemán para la Feria Mundial en Barcelona de 1929.
Inspirada en las sillas plegables y los apoyapiés en forma de X de los faraones romanos, se crea este moderno diseño con un importante peso intelectual y cultural.
El diseño original, previo a la aparición del acero inoxidable y la soldadura, consistía en patas atornilladas en forma de X y un cojín de piel de cerdo, de color marfil.