Así es, Herzog & de Meuron lo hicieron de nuevo. Nos referimos a la extensión de la Tate Modern Art de Londres, proyecto desarrollado por la oficina de Arquitectos suizos, los cuales ya habían reconstruido la antigua central eléctrica con uno de los museos de Arte Contemporaneo más alucinantes de Londres y uno de los más visitados en el mundo entero.
El nuevo edificio de la Tate Modern será una gran pirámide de cristal de formas asimétricas, ubicada por el frente opuesto al río Támesis, y corresponde a una extensión en metros cuadrados superior al 60% actual del Museo. Las razones son muy simples. Falta urgentemente más y más espacio. En palabras de Vicente Todolí, director del Museo “hay gente viendo a gente, que está viendo a otra gente que está viendo arte y eso no puede ser”.