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Arquitectos: Seferin Arquitetura
- Área: 445 m²
- Año: 2022
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Fotografías:Cristiano Bauce
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Proveedores: Arkos, Atrio conceito, Bali House, Broilo Aquecimento, Collett Moveis, Complementi, Contemporanea Moveis, Deca, Esquadritec e Ezy Color, Globo Portas, Lohn Esquadrias, Lucianne Design, Mezari, Palimanan, Portobello, SABBIA, Saccaro, Selet Garopaba, Soniflex, Sonne, +1
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El terreno de la residencia, localizado en la playa de Silveira, tiene una porción del área en protección ambiental que contiene hasta un arroyuelo, y la casa a su vez está ubicada en la zona de mayor altitud de la parcela. Una inserción estratégica de la construcción está diseñada para presentar al espectador las mejores miradas del entorno. Utilizándose de la misma estrategia, la planta baja abriga el área social de la casa, se abre a un balcón que muestra, a lo largo de toda la fachada, los visuales tanto del área de preservación como de la playa. Esta misma fachada se dirige hacia el este, garantizando la vista al amanecer. En el segundo piso pasa lo mismo: casi todas las habitaciones de la casa están orientadas al paisaje y reciben protección solar mediante un brise-soleil, sistema de sombreado móvil, una alternativa cuando se pretende evitar el calor y la iluminación. Como consecuencia y relación prioritaria, las áreas de servicio se sitúan en la fachada de acceso, que no presenta un gran interés visual por estar orientada a la calle.
El volumen se configura de manera única con distinciones en cuanto a materialidad y funcionalidad por piso. El primer piso, que contiene el área social y de servicios del edificio, está cubierto con “pedra moledo”, un tipo de roca natural de granito brasileño, elegida como representante de la naturaleza local. En el segundo piso, como es más íntimo y contiene áreas de permanencia que requieren una protección solar total, un carácter único que lo otorga el brise-soleil. El sistema de sombreado está enmarcado por hormigón visto, una seña de identidad de la arquitectura contemporánea, con patrones de tableros que marcan una vez más la textura de la madera. La materialidad externa se repite internamente, la madera vuelve a aparecer en el deck, en el techo de la galería, en el piso de la zona íntima, en los paneles y en las opciones de mobiliario, calentando la sensación de los ambientes y ofreciendo un hogar acogedor. El hormigón armado con los mismos patrones de formación se utiliza en las losas de la casa y refuerza el lenguaje contemporáneo. El volumen de la chimenea revestido en piedra también reitera esta directriz que busca un lenguaje único tanto en el interior como en el exterior.
Los propietarios de la residencia son grandes aficionados a deportes como el tenis y el surf, lo que explica la pequeña cuadra de tenis diseñada. Para practicar el surf, dentro del área de conservación existe un sendero que llega hasta la playa y para facilitar el acceso, la casa cuenta incluso con su propio vestuario de surf. Con carpintería pensada para guardar las tablas y duchas exteriores de fácil acceso directamente desde cubierta. Todavía en cubierta, la barandilla que resguarda el desnivel también sirve de banco y el diseño del respaldo brinda una mayor protección a los niños. La cocina de la casa es un gran espacio gourmet, con asador y otros electrodomésticos funcionales, y está conectada al área social con techo de doble altura y balcón. Este techo de doble altura también permite el contacto con la sala de TV que se encuentra en el entrepiso. Toda esta espacialidad tiene como objetivo brindar amplios espacios para reuniones familiares y recibir amigos. Desde el inicio del concepto de la casa, el objetivo principal fue crear una atmósfera de intercambio entre el usuario y el paisaje circundante.
