Este febrero comenzó con las redes sociales ardiendo tras los incendios desatados en la zona centro y sur de Chile. Una preocupación recurrente en los últimos años debido a su magnitud y frecuencia. Hasta el momento en diversas zonas de Ñuble, Biobío y La Araucanía, se han reportado ya casi 3.000 damnificados además de casi 1.100 viviendas destruidas, según datos recopilados por el medio La Tercera.
Ante la situación, el Colegio de Arquitectos de Chile señaló este martes 7 mediante una declaración pública firmada por Beatriz Buccicardi, la nueva presidenta del CA para el periodo 2022-2024, que esta entidad "debe ser parte de las políticas públicas que focalicen normativa, gestión, manejo y fiscalización del paisaje natural y antrópico tendiente en asegurar la relación amistosa con la ciudadanía, los medios productivos y el territorio, evitando los daños de los incendios territoriales".
Es que si bien hay varios factores que contribuyen a estos incendios, como la sequía y la alta temperatura, es cierto que los factores antrópicos son las principales causa del origen de los fuegos en la zona. "Según registros de CONAF, La Corporación Nacional Forestal, para el período 1985-2018 las causas de los incendios forestales a nivel nacional son: 56% accidentales, 32% intencionales, 11% indeterminado y sólo un 1% por causas naturales". Aquí, la falta de prevención y el manejo adecuado del territorio, los bosques y las áreas rurales son uno de los puntos claves que el Colegio de Arquitectos intenta abordar indicando que está pendiente la tarea del ordenamiento territorial.
El territorio debe ser un lugar de cuidado de sus habitantes y no transformarse por intervención humana en un espacio de amenaza constante. La solución es multifocal... El país tiene aún pendiente desarrollar y vincular legalmente los Planes de Ordenamiento Territorial Regionales, y la política medioambiental. Pero también un desafío político aún mayor como es repensar la matriz productiva en el contexto del conflicto medioambiental planetario actual.
En este sentido la preocupación de los incendios en el sur de Chile giran en torno a que también están relacionadas con la expansión de plantaciones intensivas de pinos y eucaliptos y extensas áreas de monocultivos que suelen ocurrir cercanas a zonas urbanas altamente pobladas, poniendo en riesgo a las comunidades.
En este escenario, el CA propuso algunas soluciones desde nuestra disciplina: "Tal como existe la norma sísmica sobre las edificaciones para resistir terremotos, se debe avanzar en normas que garanticen la seguridad de la población ante desastres como los incendios territoriales". Ejemplos hay varios, se deben pensar tanto cortafuegos naturales en el paisaje como cortafuegos en los centros poblados, diseñados como una propia infraestructura vial o explanadas limpias sin vegetación. Al mismo tiempo, se deben contener vialidades para evacuar y permitir el rápido acceso de vehículos. Desde el ordenamiento territorial, los Planes Reguladores no deberían definir áreas de expansión urbana limitando con masas forestales y el territorio rural debería asegurar un suministro de agua.
En el siguiente enlace, puedes revisar en detalle cada una de las 8 propuestas del Colegio de Arquitectos de Chile.