Bajo la premisa de crear un equipamiento capaz de dinamizar al barrio y a las entidades, este sábado 9 de abril abrió sus puertas el Centro Cívico y Cultural La Guardia ubicado en la plaza de la Paz de Sant Vicenç dels Horts, Barcelona. Su construcción estuvo a cargo del Área Metropolitana de Barcelona AMB mientras que la obra fue financiada por el Ayuntamiento de Sant Vicenç dels Horts y la Diputación de Barcelona.
Se trata de una intervención que conlleva una regeneración urbana del barrio de La Guardia. Actuando como un centro primordial para vecinos y entidades, busca reforzar la cohesión social y lograr la integración urbana del municipio. El AMB se dedica a planificar, diseñar y construir espacios públicos que involucran desde calles o plazas hasta equipamientos tales como centros cívicos, escuelas, institutos o polideportivos. Uno de los tantos ejemplos es la zona deportiva de Ricard Ginebreda en Molins de Rei, que fue diseñada con el objetivo de reunir varios deportes en un único complejo fomentando así el aspecto social que caracteriza a la entidad.
El Centro Cívico y Cultural La Guardia ocupa un espacio de 556,65 m2 y se implanta sobre el área central de la plaza frente a un gran arbolado existente que se preserva en carácter de parque con diferentes espacios recreativos. En su programa, presenta desde un vestíbulo, una sala polivalente, aulas y despachos hasta una enfermería, peluquería, un almacén, áreas de servicios e instalaciones y diversos espacios de comunicación.
Los tres factores que se destacan en esta obra se centran en la calidad arquitectónica, la sostenibilidad ambiental y la integración con el espacio público ya que, a la hora de llevar adelante el equipamiento, se tuvieron en cuenta la sostenibilidad y la descarbonización tanto en el diseño como en su construcción utilizando materiales de bajo impacto ambiental y aprovechando al máximo los recursos naturales como el viento o el sol.
El edificio cuenta con una calificación energética de clase A, la más eficiente, y tiene un consumo de 139 KW/h x m2. Al contar con ventilación cruzada, permite el ingreso de aire natural y regula la temperatura. Su fachada acristalada y la entrada de luz central proveen de abundante iluminación natural al conjunto. Con respecto a su materialidad, se utiliza madera o bloques de hormigón para prescindir de revestimientos y a la vez, reducir las emisiones. La aerotermia se emplea para calentar el agua caliente mientras que se instalan tecnologías de sensores, capaces de detectar el grado de luz y temperatura para poder optimizar los consumos.
El Área Metropolitana de Barcelona AMB ya ha construido ocho centros cívicos y posee aún varios en etapa de proyecto. Hacia fines de mayo, prevén completar la construcción de otro centro, el Centro Cultural y Cívico Vírginia Amposta en el mismo municipio, supliendo la oferta de equipamientos públicos y contribuyendo a reforzar, como se mencionaba anteriormente, la cohesión social. Este último busca incorporarse dentro del visor de equipamientos metropolitano. Esta herramienta digital almacena datos geográficos con información precisa de todos los equipamientos ya sea locales, edificios o espacios abiertos, cuya función sea brindar un servicio a las personas y mejorar su calidad de vida.