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Arquitectos: FGMF
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Fotografías:Rafaela Netto
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El proyecto del Complejo Don Pedro consta de dos clubes con zonas exteriores deportivas y de ocio. La arquitectura debe proponer una identidad única para ambos clubes, pero al mismo tiempo el diseño fluye de manera independiente, organización, espacios, dimensiones, relación con las vistas y el entorno. Casi como dos proyectos en uno.
Después de varios estudios, decidimos iniciar el proyecto en un primer momento por las áreas exteriores -ordenamos las canchas, juegos infantiles, piscinas y espacios de acceso- y previendo los espacios más adecuados para albergar cada uno de los edificios de la sede. Para los volúmenes, asumimos un concepto simple: adoptamos una especie de "unidad volumétrica", como resultado de un corte del programa original. Con la reducción de este programa obtuvimos una sectorización clara de cada una de las áreas importantes del edificio – vestuarios, gimnasio, hall, salón de fiestas, servicios, accesos, etc.
Cada una de estas unidades de programa se organizó buscando la mejor ubicación de los edificios, y su relación con los espacios externos y los flujos internos. Para cada unidad creamos un volumen que varía en dimensiones y alturas, pero siempre siguiendo la regla de tener dos lados abiertos, uno para el acceso principal y otro para las piscinas y vistas. Luego comenzamos a entrelazar los volúmenes y crear construcciones continuas. Este entrelazamiento jerarquiza la sectorización del programa, permitiendo la identificación de cada área a la distancia, al mismo tiempo que crea una volumetría casi escultórica, que crea visuales diferentes e interesantes para el usuario que se encuentra en diferentes lugares del conjunto.
Los muros internos fueron retranqueados del volumen unitario principal y revestidos de madera, conservando la volumetría principal. Todos los volúmenes recibieron revestimiento completo de cemento – piso, paredes, techos. Sin embargo, buscamos tres variaciones de gris claro entre estos revestimientos para enfatizar la independencia entre la función de cada espacio.
Como base para cada bloque, propusimos muros de gaviones expuestos, normalmente utilizados en obras de infraestructura como contraste con la forma pura del edificio mencionado anteriormente. Estos volúmenes se organizan de un lado a otro a través de los muros de gaviones, apoyándose en las vistas o en las piscinas.
El resultado general del proyecto fue el de un diseño único y fuerte para los dos edificios del complejo, dando como resultado volúmenes casi escultóricos. A pesar de la clara relación entre los edificios, y partes iguales, cada uno de ellos tiene un carácter único y relaciones muy íntimas con el programa exterior y la naturaleza circundante.