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Arquitectos: Ferdinando Fagnola, PAT. architetti associati
- Área: 350000 m²
- Año: 2018
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Fotografías:Pino dell’Aquila
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Concebido en la década de 1970 por Ferdinando Fagnola y Gianni Francione, el complejo de villas incrustadas en una localidad cercana a la Costa Smeralda en Cerdeña, Italia, ha sido recientemente objeto de un brillante proyecto de renovación diseñado por el propio Fagnola junto con PAT. architetti associati. La vitalidad, las cualidades espaciales, la sensibilidad medioambiental y el espíritu comunitario que inspiraron el proyecto hace cuarenta años se han renovado, reviviendo así un episodio poco conocido de la mejor arquitectura italiana.
El complejo de viviendas diseñado en la década de 1970 por los arquitectos Ferdinando Fagnola y Gianni Francione tiene vistas a la costa noreste de Cerdeña. Un proyecto mimético pero con una actitud firme, guiado por la voluntad de integrar el entorno construido con el entorno natural, y por tanto desestructurado y distribuido en una serie de volúmenes rigurosos que cortan el suelo como cuñas, generando una serie de relaciones y espacios abiertos. Las viviendas tienden a desaparecer en la naturaleza y se mezclan con la vegetación.
Cuando fueron concebidos, interpretando las concepciones más originales y las mejores sensibilidades ambientales de finales de los años setenta, los volúmenes fueron diseñados para establecer una relación casi mimética con la naturaleza, alejándose de la lengua vernácula mediterránea que era popular en la zona. Los edificios emergen del suelo y sus formas misteriosas y severas fueron diseñadas para relacionarse con el espacio y la orografía del suelo.
Hoy, cuarenta años después, por fin se cumple la visión general del complejo. Esto se debe a la adquisición de tres de las cinco unidades originales en 2011, lo que permitió reagrupar el conjunto arquitectónico inicialmente concebido. Volúmenes adicionales fueron posibles gracias a Piano Casa y nuevas funciones recreativas y deportivas que guiaron el programa.
El arquitecto Ferdinando Fagnola, quien diseña museos, oficinas y residencias desde hace más de cuarenta años, fue el encargado de renovar las casas. Propuso apoyarse en compañeros más jóvenes de PAT, un despacho con actividad internacional y numerosos trabajos que integran el diseño y una firme apuesta por la sostenibilidad. Influenciados por nuevas sensibilidades y guiados por nuevos criterios constructivos, los volúmenes que emergen parcialmente del suelo y se esparcen en el entorno expresan hoy toda su contemporaneidad y cuentan la historia de un proyecto atemporal que desarrolla sus intenciones originales y da lugar a una fecunda colaboración entre dos generaciones de arquitectos.
Visto hoy, las villas han mantenido su carácter moderno y atemporal: las líneas rígidas y esenciales de los edificios se mezclan bien con el entorno circundante, pero descubren una nueva juventud. Nuevos colores, nuevas tecnologías, un proyecto que todavía cuenta un conocido episodio de la mejor arquitectura italiana: Fagnola y PAT. Es una intervención filológica, pero también una invención que dialoga con la obra de los maestros y da lugar a un ejercicio proyectual continuo del que emerge un relato sólido, estructurado y repleto de episodios sorprendentes.
Con el nuevo equipo, el proyecto recuperó la fuerza radical de su visión original y al mismo tiempo introdujo nuevos elementos que se encuentran en materiales, colores, distribución y organización espacial que se extiende a todo el conjunto en el concepto de fragmentación de funciones que ya caracterizó cada unidad. La reunificación de las distintas propiedades en una sola obra integrada, distribuida en planta, fue el hilo conductor del nuevo proyecto, concebido para el uso de una familia numerosa compuesta por un matrimonio con cinco hijos y sus numerosos invitados.