-
Arquitectos: ARCHWERK, Formafatal
- Área: 244 m²
- Año: 2020
-
Fotografías:BoysPlayNice
-
Proveedores: Interlude Home, Marilou, Naluri Collection, Notre Monde, Sondaleza, WAC Lighting
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Frente a Playa Hermosa, cerca de la ciudad costarricense de Uvita, en una empinada ladera de selva tropical de 2.5 hectáreas, se encuentra el escondido complejo turístico "Art Villas". COCO forma parte del complejo con sus glamurosas tiendas de campaña y representa un ejemplo único de arquitectura tropical lúdica, sostenible y moderna. Cuando el inversor se acercó a los arquitectos, deseaba crear un lugar donde los visitantes se fusionaran con la naturaleza circundante, despejaran sus mentes y experimentaran el lujo y la aventura al mismo tiempo. Quería crear un lugar que fuera recordado por sus visitantes.
El cliente, Filip Žák, se dirigió a nosotros con un desafío asombroso: construir con soluciones simples y materiales locales una vida lujosa, pero al mismo tiempo aventurera, brindando la experiencia de una estadía inmediata en la jungla costarricense. Según sus palabras, deberían ser "casas en los árboles" ubicadas en la ladera del complejo Art Villas, un jardín recién establecido sin árboles completamente desarrollados. Y pidió un diseño que nadie había visto antes. Diseñamos un nido de varios refugios ubicados en una cascada con vista al valle y los llamamos Coco. En nuestro diseño, utilizamos nuestra experiencia previa de la finalización de nuestro diseño experimental, la arquitectura del paisaje y el diseño urbano.
El material de construcción principal es la madera tropical local, complementado con una tela de carpa y elementos metálicos. La construcción racional es la base del diseño. Crea la forma y el ambiente por sí mismo, sin necesidad de decoración adicional. El principio de construcción permite flexibilidad en el tamaño, la forma y la composición de varios objetos similares en terrenos complicados. “La naturaleza ha utilizado el mismo principio creativo durante millones de años. La naturaleza nos inspira a crear un entorno que amamos y en el que nos sentimos seguros. Seguimos los principios de la Arquitectura Natural, tal como los formuló nuestro amigo y maestro, el arquitecto Martin Rajniš ”, dice Martin Kloda.
Formafatal siguió el trabajo de los arquitectos de Archwerk y, junto con el cliente, terminó el diseño de los edificios individuales de Coco. Un conjunto de cinco pequeños edificios levita unos metros por encima del terreno en pendiente y es absorbido por una exuberante vegetación tropical. Studio Formafatal ha conectado sensiblemente los edificios individuales mediante pasarelas y escaleras de madera y metal expandido, que se montan sobre columnas de acero. Las plataformas sirven como miradores, o incluso para saltar en un trampolín en uno de los descansos.
Las pasarelas y descansos tienen una forma minimalista y los diseñamos intencionalmente con líneas limpias, que son típicas de otros edificios del resort. Solo las terrazas principales en los dos niveles de altura se basan en la forma de las propias casas de Coco, formas que son suaves y orgánicas. Estas terrazas están ubicadas muy cerca de la jungla y también ofrecen vistas al Océano Pacífico. Los interiores son minimalistas y divertidos. Allí no encontrarás nada innecesario, pero al mismo tiempo, no falta nada. El punto focal de cada habitación de Coco es una cama que se encuentra en una parte elevada del piso.
La distribución de cada cabaña está diseñada para aprovechar las vistas más impresionantes, donde los monos y los tucanes pueden ser vistos directamente desde la cama. El mosquitero es una especie de objeto que respeta la forma del edificio y es el elemento dominante de cada dormitorio. La parte trasera de las camas está diseñada a partir de la malla de alambre soldado. En cada dormitorio se elige un color diferente, que se refleja en el esquema de colores de los vestidores. El diseño artístico de los cabeceros tejidos no es accidental. "Cuando pensé en un motivo que encajara en Coco, evocó en mí los recorridos de las copas de los árboles, que son muy populares en Costa Rica.
Estos son senderos y tirolesas muy por encima del suelo en las copas de los árboles, algo parecido a Coco que se encuentra a unos pocos metros del suelo. Por eso utilicé el motivo de una cuerda de escalada en forma de correas y cordones de colores, que también aporta un acento de color a los interiores de Coco ”, dice Dagmar Štěpánová. En el Coco más grande hay una cocina compartida con zona de comedor. La pared del gabinete rojo de color de “mamón chinos (fruta tropical)” contiene 2 refrigeradores, 2 congeladores y gabinetes para alimentos. La isla de cocina sirve para preparar comidas y ofrece mucho espacio de almacenamiento para todos los platos. La mesa del comedor es una continuación visual de la isla como si acabara de arrancarse. Este eje longitudinal es intencional y apunta al Océano Pacífico.
Las persianas transparentes y blancas protegen el interior de la lluvia y el viento al tiempo que permiten que penetre la luz del día. Reflejos de luz y sombra se filtran a través del gran mosquitero que ofrece protección contra las criaturas salvajes de la jungla. Cuando llegamos por primera vez a Costa Rica, pensamos que era por el océano y las playas salvajes. Ahora nos damos cuenta de que nuestra relación simbiótica es con el denso y verde bosque tropical.
La jungla es nuestro hogar, pero no es nuestro. Presenta condiciones que nos desafían a permanecer presentes y respetuosamente conscientes de las leyes de la naturaleza. A pesar del lujoso confort que se encuentra en el alojamiento, abundan las actividades de mejora personal, desde cocina experta, masajes, sauna y yoga, así como acceso al pabellón del spa y al gimnasio profesional. Un gran trampolín y una sala de juegos mantienen a los niños activos, comprometidos y sociables. Los talleres de arte, así como los retiros de cuerpo, mente y alma, conectan a las personas con ideas afines. Aquí se puede disfrutar de los placeres de la vida con alegría y curiosidad, en solidaridad con la naturaleza.
