El desarrollo de Modelos BIM, compuestos por Objetos BIM denominados familias por la herramienta Autodesk Revit, resulta cada vez más frecuente en la industria ya que constituyen un medio para lograr una mayor productividad en cada proyecto. Pero, ¿cuáles son las claves a considerar cuando comenzamos a desarrollar una familia? En el presente artículo exponemos los principales puntos que debemos tener en cuenta al momento de planificar las familias cargables, que son las que incorporamos a nuestra Biblioteca BIM.
Para poner en contexto a las familias cargables, debemos recordar que Autodesk Revit ofrece la posibilidad de conformar tres tipos de familias: las de sistema, las cargables y las in-situ. Las familias de sistema son predefinidas por Autodesk Revit y las únicas modificaciones que admiten están relacionadas con la creación o ajuste de los tipos en el marco de un proyecto particular y la creación de nuevos parámetros. Las familias cargables, cuya extensión es .rfa, son aquellas que se crean en archivos externos al del proyecto y contienen todo lo relacionado a las mismas como la información y tipos, entre otros aspectos. A su vez, se almacenan en las Bibliotecas BIM para ser reutilizadas a futuro. Por último, las familias in-situ son aquellas que se crean exclusivamente para un proyecto y no son reutilizables en otros.
Las familias cargables deben cumplir con el Estándar BIM de la organización. A su vez, para que éstas actúen de la forma deseada y que el proceso de creación sea eficiente, debemos planificarlas cuidadosamente para obtener mejores resultados. A medida que adquirimos experiencia en la realización de familias, la planificación resultará más ágil, ya que podremos detectar con mayor claridad los requerimientos de las mismas. A continuación, se detallan aspectos claves que debemos tener en cuenta al planificar una familia cargable:
Adaptabilidad
Evaluar si es posible adaptar una familia existente, ya sea de la Biblioteca BIM de la organización o descargandola de los Catálogos BIM de los fabricantes. Si estas opciones no son viables, entonces se deberá construir la familia desde cero. En este punto es importante realizar la evaluación tanto desde el punto de vista de la geometría, la cual representa las propiedades físicas del elemento, como de la información que contiene.
Comportamiento
Identificar las necesidades de la familia en relación a las propiedades, variaciones de dimensiones, materiales, tipos de familia y cualquier otra variable relevante para el objeto. En este punto entran en juego los parámetros y las fórmulas relacionadas a éstos, los cuales cambiando sus valores hacen posible que las familias sean dinámicas. Para ello es aconsejable realizar bosquejos a mano con el fin de visualizar el objeto con los parámetros correspondientes para luego materializarlos mediante la herramienta de modelado.
Nivel de detalle
Debemos contemplar el nivel de detalle con el que realizaremos las familias, el cual depende de los usos y objetivos BIM que se definan para la organización o para el proyecto. El nivel de detalle está alineado a un estándar nacional o a una referencia internacional. Algunas referencias valiosas son las publicadas por el American Institute of Architects (AIA), que utiliza el término LOD (Level of Development) o nivel de desarrollo. En Chile, el estándar BIM para proyectos públicos establece NDI (Niveles de Información). En cualquiera de los casos el objetivo es definir el alcance del contenido de la familia según el nivel de desarrollo establecido. Por lo tanto, dichas publicaciones generan un marco de referencia de trabajo confiable y estandarizado para los profesionales de la industria.
Selección de plantilla
Como existen las plantillas para la realización de los modelos, también encontramos las plantillas de familias (.rft). Es una herramienta muy útil para utilizar como punto de partida para la creación de una familia. El primer paso que debe llevarse adelante al momento de comenzar el desarrollo de las mismas es la selección de una plantilla en función del objeto a crear, para ello debemos pensar en el comportamiento que debe tener la familia en nuestros modelos y si requerimos que esté basada en un anfitrión. Las familias basadas en anfitrión son aquellas que únicamente se pueden colocar en el modelo en elementos previamente modelados de tipo anfitrión, a modo de ejemplo, el anfitrión de una puerta es un muro.
En conclusión, una vez que tengamos definidos estos puntos, nos encontraremos en condiciones de modelar el objeto. Las familias nos permiten explorar infinitas posibilidades, gracias a que éstas se basan en parámetros totalmente customizables. El éxito en el modelado estará dado por una buena planificación previa.
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