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Arquitectos: MEC Arquitectura
- Área: 206 m²
- Año: 2019
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Fotografías:Manuela Eble
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El Chocolab es un centro de desarrollo e innovación cuyo objetivo principal es estimular la cultura y el intercambio de conocimiento para promover la transformación social y sostenible. El proyecto en sí es un ejemplo de lo que es alcanzable con materiales y tecnologías locales que responden eficientemente al medio ambiente.
El diseño del edificio está basado en estrategias pasivas que reducen el consumo de energía a lo largo del ciclo de vida del edificio. El proyecto involucró activamente a la comunidad en el proceso de construcción a través de un programa educativo sobre la transformación y el uso de madera. El edificio da un nuevo significado a la construcción tradicional local y sirve como un lugar que la comunidad puede abrazar como propio.
El proyecto está ubicado en medio de una gran finca de cacao que usa árboles de melina para dar sombra a los cultivos y está rodeado de bosques de teca. Aunque hay abundancia de este material en la zona, la madera se percibe como un material de construcción barato y pobre. La estrategia de diseño estuvo basada en usar tanta madera como fuera posible, porque no sólo es un material sostenible y reduce la huella de carbono, sino también porque permitió el desarrollo del proyecto como programa educativo.
A lo largo del programa, enseñamos a los locales a transformar y construir en madera con técnicas que en el futuro podrían adoptarse en otros proyectos locales. El proyecto se utiliza como una plataforma activa que instruye a la comunidad para tener un enfoque sostenible en proyectos nuevos. Dado que el edificio está ubicado en un lugar cálido y húmedo, el diseño está basado en estrategias pasivas para ayudar a mitigar el clima sin aumentar el uso de energía.
El proyecto utilizó estrategias para garantizar ventilación natural, usando un sistema de fachada de baja-tecnología que es permeable y que permite inducir el flujo de aire a través del edificio. Este elemento garantiza al mismo tiempo la entrada de la luz solar para que el interior del edificio haya condiciones adecuadas de iluminación y simultáneamente mantenga un ambiente fresco, asegurando un alto confort térmico. Además, el agua utilizada en el edificio proviene de agua de lluvia tratada.
El edificio del Chocolab fue diseñado para ser flexible y adaptable. Su fachada, que está hecha de madera, es móvil y permite que el edificio responda a las necesidades de los usuarios y al clima, garantizando al mismo tiempo comodidad térmica. El espacio principal es divisible en 3 para que diferentes actividades pueden ocurrir en cada uno, o puede estar abierto incluso al espacio exterior para que se pueda usar en una sola actividad. La fachada permeable permite que el edificio se articule ampliamente con su entorno inmediato.