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Arquitectos: PROD arquitectura & design
- Área: 1 m²
- Año: 2015
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Fotografías:João Morgado
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Proveedores: Guardian Glass, O/M Light - Osvaldo Matos, Schmit-Sohn, Umbelino Monteiro, Weber, XPZ madeiras
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Palacio de Vitorino es una casa señorial ubicada en el norte de Portugal que ha pertenecido a la misma familia desde mediados del siglo XVI. Su historia se ve marcada por varios eventos relevantes. El más destacado fue a mediados del siglo XVIII, momento en que se inició una gran intervención según los cánones barrocos, cuya construcción resultante se caracteriza por una casa principal de tres pisos en el lado este, dos alas laterales en el lado norte y sur y una pequeña capilla a lo largo del muro de entrada en el oeste. Estos elementos delinean un gran patio central definido por fachadas adornadas.
El proyecto propuso una profunda rehabilitación de la estructura existente y su adaptación a un hotel de 15 habitaciones para distribuir a lo largo de la casa. La escala del jardín barroco en el sur, con sus tanques y estatuas consideradas de valor inusual en un contexto privado, justificó la creación de un centro de interpretación de jardines históricos que mostraría los hallazgos arqueológicos en el sótano.
El proyecto enfrentó varios desafíos debido a la necesidad de introducir nuevos elementos para resolver el programa:
- 1 pasaje para proporcionar un enlace interior en la planta principal del hotel a través del patio, la sala de estar y el resto de los espacios. Esto se logró mediante el diseño de una delicada estructura de madera y vidrio inspirada en las referencias en el sitio.
- 15 aberturas para conectar las habitaciones del ala al jardín barroco en el sur y los campos en el norte. Estas aberturas que rompen paredes gruesas y largas buscan una cierta neutralidad a través de paneles de vidrio verticales, empotrados en marcos metálicos y dispuestos de acuerdo con un ritmo regular.
- 12 módulos de madera para proporcionar el marco para las características técnicas requeridas en espacios de considerable amplitud, tanto en las alas como en la casa principal. Estos elementos se colocaron estratégicamente a una distancia de las paredes y los techos para enmarcar simultáneamente las características, organizar el programa y mejorar el espacio circundante.
