Nacida en Rio de Janeiro fue una arquitecta, diseñadora y galerista brasileña.
Hija única del famoso arquitecto Oscar Niemeyer, trabajó con su padre en la construcción de Brasilia, después de haber sido responsable de la arquitectura interior de varios edificios públicos en la ciudad.
En los años setenta, creó una línea de muebles, expuesta en diferentes instituciones en Brasil y en el extranjero. En 1977, fundó la Galería Anna Maria Niemeyer, un espacio dedicado a la difusión y comercialización de arte contemporáneo en Río de Janeiro.
La relación entre Anna María Niemeyer y Oscar Niemeyer es un capítulo especial. Esta relación no sólo se limitó a la esfera familiar. Hija única de Oscar Niemeyer, Anna Maria fue socia profesional de su padre, contribuyendo en diversos proyectos arquitectónicos, antes de convertirse en una admirada marchante de arte.
Se dedicó al diseño de interiores, realizando numerosos proyectos como empleada de NOVACAP (Compañía Urbanizadora de la Nueva Capital de Brasil) entre ellos: los palacios de Planalto y Alvorada, el Congreso Nacional y el Tribunal Supremo Federal de Brasilia.
Juntos estudiaron y diseñaron una línea de muebles producidos en Brasil, y que también fueron fabricados en Italia, habiendo sido en ambos casos expuestos en espacios como el centro Georges Pompidou en París o Chiöstro Grande, en Florencia, además de varios museos brasileños.
El recorrido como marchante de arte de Anna Maria Niemeyer se inició en 1977, con la Galeria Anna Maria Niemeyer, en el barrio de Leblon, zona sur de Río de Janeiro. En 1979 se trasladó al Centro comercial de Gávea y, desde enero de 2006, había abierto una sucursal, en Praça Santos Dumont, en Gávea. En estos tres espacios, expuso con regularidad y criterio el arte brasileño contemporáneo y realizó cientos de exposiciones individuales, colectivas y promocionando además algunos lanzamientos de libros relacionados con el arte y la cultura.
* Texto por Eva Alvarez, cortesía de Un Día | Una Arquitecta
