Estudiantes de de Arquitectura del la Universidad Autónoma de Chiapas estudiaron y observaron el paisaje en forma íntima con el objetivo de plantear la construcción de tres prototipos que reflexionan en torno al contexto natural y cómo intervenirlo.
De los arquitectos.
Un acto de apropiación del espacio e intervención en el territorio a través de la contemplación. Un suceso único y personal. Un objeto efímero construido en un día, bajo lineamientos de trabajo muy específicos, con materiales ligeros y económicos, el objeto es creado para contemplar la puesta del sol, el río o la ciudad.
Sin realizar un proyecto específico y sin un usuario determinado, desde la materia Arquitectura Sustentable, 19 estudiantes de arquitectura realizan la conceptualización, diseño y construcción de objetos efímeros con materiales naturales. El objeto explora las diferencias entre mirar, observar y contemplar. Pretende intervenir el paisaje sin modificarlo fisicamente. Determinarlo y amplificarlo perceptivamente. Realizaron un evento que nunca sucedió, porque lo que sucede una vez, es como si nunca hubiera ocurrido.
El ejercicio busca trascender el acto de mirar, que es un acto pasivo. Busca la Contemplación, un acto introspectivo. La palabra contemplar viene del latín contemplari, mirar atentamente un espacio delimitado, compuesto con la preposición cum, compañía o acción conjunta, y templum, lugar sagrado para ver el cielo o un paisaje.
La idea principal fue el experimentar la relación entre el paisaje, el objeto, y el observador. Así, los objetos resultantes fueron determinados como: Observatorios del paisaje. Logrando configurar un lugar especifico en el territorio.
Tres objetos fueron construidos: Atrapasueños, Capturar el aire, Banca Bambú.
1.- Atrapasueños
Construido con carrizo e hilos de hamaca, el objeto fue situado en Chiapa de Corzo, Chiapas; Orientado hacia el Río Grijalva y la parte oriental de Tuxtla Gutiérrez. Su objetivo es servir para vivir una experiencia en el atardecer, sentir la brisa, contemplar las montañas y la ciudad.
2.- Capturar el aire
El mar, su visual y su profundidad se escapan a nuestras manos. La única manera de apropiarnos y tocar el paisaje es por medio del aire. La brisa pasa por medios de hilos de estambre tejido en forma hiperbólica, lo cual intensifica los decibeles y lo hace perceptible intensamente. El objeto fue construído con madera de reúso y estambre, permite la introspección y capturar el sonido de la brisa del mar. El objeto fue situado en Puerto Arista, Chiapas.
3.- Banca Bambú
Observar el Río Grijalva desde un objeto creado específicamente para ese lugar. Intervenir el paisaje con materiales naturales y técnicamente fácil de hacer. La banca bambú puede ser reutilizado, ya que de desmantela fácilmente y las piezas conservan su forma original. La banca de bambú fue situado en los márgenes del Río Grijalva, Chiapa de Corzo, Chiapas, donde los enamorados llegan a observar el paisaje y el atardecer.
Equipo de estudiantes: Carolina Álvarez, Mariana Moreno, Cindel Isaias, Paola Molina, Lizbeth Urbina, Milton Mendez, Diana Ruiz, , Myriam Bermúdez, Michael Pineda, Ulises Cruz, Crescencio Gómez, Leyber González, Jose Alfredo López, Charlie Lozano, Cynthia Maza, Alejandra Mendoza, Karen Morales, Fernando Navarro, Victor Vila.
Semestre: Séptimo A, Facultad de Arquitectura, Universidad Autónoma de Chiapas, México.
Arquitecto Asesor: Antonio Nivón
