La oficina colombiana Taller Síntesis es la ganadora del concurso privado para el diseño de la nueva sede del Colegio Bartolomé de las Casas en Buenaventura, Colombia. Fundado en 1977, las instalaciones del establecimiento educacional fueron trasladadas en 2009 por problemas geológicos, pero a comienzos de este la Fundación Sociedad Portuaria Regional de Buenaventura “Fabio Grisales Bejarano” decidió construir una nueva sede en donde antiguamente funcionaba el colegio. La organización buscó propuestas "que ayude[n] a convertir este edificio en un referente para la comunidad y en un espacio de encuentro en una zona de expansión de la ciudad".
Considerando la geografía del lugar, los ganadores optaron por "descomponer el colegio en una seria de módulos que se adaptan al terreno, y se van ubicando de acuerdo a las pendientes, lo que permite además que cada espacio tenga una relación directa con el paisaje lejano, y a la vez a través de patios y aperturas se permite el ingreso físico de la naturaleza, haciendo que sea un edificio donde se estudia en medio de la naturaleza".
Descripción de los arquitectos: el puerto de Buenaventura es por donde entra y sale más del 70% del comercio de Colombia, lo que ha hecho que este municipio se concentre en este importante eje económico. La normativa vigente evidencia la importancia del puerto y el como la mayoría de las áreas de expansión del municipio se están destinando a dinámicas comerciales. Preocupa sin embargo una clara zonificación en donde la vivienda se mantiene en la zona central del municipio mientras las zonas comerciales e industriales rodean el actual casco urbano
Esto nos lleva a entender el proyecto como una oportunidad de desarrollo que va más allá de un colegio. A ver el lote como una zona que pronto será absorbida por el casco urbano y que tiene un potencial enorme para el desarrollo de actividades comunitarias y pedagógicas que generen una centralidad local. Igualmente se logran identificar en el municipio zonas que podrían aprovecharse de esta manera generando una red.
Planteamos entonces la generación de un sistema replicable, adecuado a las condiciones climáticas del territorio y que se relacione de diferentes maneras con el territorio de acuerdo a las necesidades de cada lote.
Condiciones proyectuales
El colegio se ubica en un terreno de altas pendientes en las afueras de la ciudad. Esta condición topográfica permite una serie de vistas lejanas de gran calidad, pero a la vez plantea el reto de disponer un proyecto en las escasas áreas planas.
Dentro de las bases del concurso se planteaba una serie de llenos de grandes dimensiones para aumentar las áreas aptas para la construcción de los edificios. Sin embargo esto lo descartamos, no solo por cuestiones técnicas y económicas sino también porque desvirtuaría una de las principales ideas con que se ha concebido el enfoque pedagógico del colegio: estudiar en la naturaleza. Así afectar cursos de aguas y realizar grandes operaciones de movimientos de tierras hablaría de lo contrario, de no ser sensible al lugar y el contexto.
Así pues era imposible la realización de un volumen compacto que entrara a intentar ajustarse en un lote que a todas luces no apto para esto. Se procede en su lugar por descomponer el colegio en una seria de módulos que se adaptan al terreno, y se van ubicando de acuerdo a las pendientes, lo que permite además que cada espacio tenga una relación directa con el paisaje lejano, y a la vez a través de patios y aperturas se permite el ingreso físico de la naturaleza, haciendo que sea un edificio donde se estudia en medio de la naturaleza.
En el punto más alto del lote, cercano a la vía de acceso del mismo se ubican los usos más públicos del programa: Biblioteca, oficinas, comedor y teatro. La ubicación de estos programas en un bloque dispuesto hacia el acceso permiten que este funcione como un edificio público que puede prestar sus servicios tanto hacia el interior como al exterior y servir a la comunidad aun en los momentos en que el colegio este cerrado.
Como extensión de este equipamiento comunitario se ha diseñado una plaza cubierta de llegada, que permite la realización de actividades culturales y comunitarias, y de interacción espontanea de las personas. Los volúmenes de las aulas se disponen en módulos tipo, dilatados y dispuestos siempre alrededor de un patio o de uno de los equipamientos de un carácter más privado del colegio. Este sistema como se dijo antes se adapta a la difícil topografía del lote, enriqueciendo tanto las visuales como la experiencia del recorrido y de lo espacial.
Los módulos son construidos en estructura metálica, con cerramientos móviles que permiten la apertura total del aula hacia las circulaciones y los patios y espacios colectivos. La piel de estos son persianas en madera, lo que permite el cruce continuo del viento, lo que sumado a un gran volumen de aire por la altura de los módulos, y a la cubierta con aislante térmico, que no se requiera de ningún equipo para mantener el confort térmico de los espacios.
Este sistema de construcción permite no solo la ejecución de la institución, sino también la posible ocupación de otras áreas del lote para espacios como aulas ecológicas, miradores e incluso viviendas.
Arquitectos
Taller SíntesisUbicación
Buenaventura, Valle del Cauca, ColombiaArquitectos a cargo
Lucas Serna, David Cuartas, Farhid MayaColaboradores
Isaac Ramírez Marín, Anderson Serna Montoya, Manuela Sánchez Aguirre, Santiago Restrepo Velásquez, Lina Flórez Díaz, Santiago Restrepo, Daniel Molina, Federico Fois, John Fredy VásquezPremio
Primer LugarÁrea
6300.0 m2Año Proyecto
2016Fotografías
Cortesía de Taller Síntesis