- Área: 15 m²
- Año: 2015
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Fotografías:András Krizsán + Alexandra Varbai
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Proveedores: JAF GROUP
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Un imponente edificio en Terehegy fue diseñado por los estudiantes de la Universidad Szent István (SZIE) - Ybl Miklós Colegio de Construcción, Facultad de Arquitectura e Ingeniería Civil (Stefánia Radnai, Csaba Székely, János Korpás y Máté Kis) bajo la guía de los instructores: István Fülöp y András Krizsán DLA, y construido con amplio apoyo local.
En la frontera de la aldea, al lado de la carretera junto a un viñedo, el cementerio protestante se sitúa como una arboleda verde entre el gran escudo de tierras agrícolas. El jardín del cementerio cubierto de arbustos y árboles ahora sólo se utiliza de vez en cuando. Las ceremonias fúnebres se llevaban a cabo al aire libre, a veces bajo la lluvia y el barro, en condiciones indignas. No había un área designada, un espacio interior donde poner el ataúd, donde el sacerdote pudiera orar y los familiares pudieran decir su último adiós a su ser querido.
La tarea consistía en diseñar un edificio comunitario polivalente y una funeraria, lo cual es una construcción sencilla y medio cubierta que protege contra la lluvia y el sol. Donde se encuentra el lugar para el féretro y los parientes, se da el ambiente impresionante de la muerte, pero también capta la atmósfera del paisaje. Debe ser una construcción determinante pero no excesiva en el cementerio, uniendo los elementos ambientales (camino, pendiente, tumbas, escaleras) con la ceremonia fúnebre. Tiene que mostrar una función sacra junto con el valor arquitectónico de la estructura.
Debido a una iniciativa local, András Krizsán, contactó a István Fülöp, quien organiza campamentos anuales de construcción. Al principio este proyecto fue el tema de la semana-taller en los cursos de Masters y terminó con una exposición. Después de algunas sugerencias valiosas e inspiradoras, los estudiantes de Bsc le dieron la forma final al proyecto en sus ejercicios de examen del semestre. Trabajando en equipo, los estudiantes diseñaron los planos, refinaron y aclararon el concepto semana tras semana. Fue un factor motivador que esto pudiera ser su primer proyecto construido, pero también tuvieron que prestar atención para hacerlo factible y fácil de realizar. El pensamiento común profundizó el contacto entre el cliente y los diseñadores: para el cliente este proyecto fue una historia personal y se convirtió en un reto vivo para los estudiantes.