Descripción enviada por el equipo del proyecto. Este proyecto se ubica en la zona norte de la isla grande de Chiloé, en un sector llamado Huei hue, en donde el mar penetra la tierra a modo de estrías, tejiendo una estrecha relación entre tierra y mar.
El terreno se ubica en una suerte de península desde donde domina estratégicamente las relaciones del lugar: por un lado, las entradas de mar interior que entran desde este brazo y por otro lo inconmensurable del golfo de Ancud, teniendo como telón de fondo el desprendimiento de la cordillera de los Andes y sus volcanes, recibiendo generosamente la luz de Oriente, norte y poniente, y exponiéndose de paso, a los fuertes vientos y lluvias que provienen del noroeste.
Estas condiciones naturales sumado a un encargo específico para una vivienda unifamiliar, unida, pero dispersa, condiciona a que el proyecto tenga la capacidad de plantearse a sus diferentes usos constantemente. Una pareja mayor, con hijos mayores, nietos, y amigos, en donde todos necesitan su espacio y en donde la casa no siempre se usa simultáneamente. La vivienda debe adecuarse tanto como a dos personas como a quince personas, siempre practica y cómoda en sus distintas funciones.
Es así que la propuesta se plantea con una fuerte imagen a los asentamientos rurales Chilotes, de agrupamiento, de sumatoria de volúmenes, en donde los volúmenes son emplazados en forma de abanico aprovechando las vistas, topografía y resguardándose entre sí, de vientos y lluvias.
De esta manera, se plantea un volumen mayor, la casa principal, la cual organiza techos, terrazas y dos volúmenes anexados, unidos por una gran terraza. Estos volúmenes emplazan cada uno los dormitorios de visitas y niños con sus baños a modo de otra vivienda independiente, la cual se habilita exclusivamente cuando es utilizada. De esa manera la casa se habita a través de exclusas, las cuales se abren dependiendo del número de integrantes, acogiéndose a las necesidades y requerimientos en sus determinados momentos.