Saliendo de un fin de semana de temperaturas brutalmente frío en el noreste de Estados Unidos, elogiar el hielo podría molestar a algunos. Pero al ver las creaciones acuosas de los Ice Castles ubicados en Utah, generan un caso convincente para soportar la ira del invierno. Usando un sistema patentado, la empresa diseña construcciones de hielo formados a través de un proceso aditivo en el que una subestructura de malla hecha de carámbanos se riega con agua líquida, lo que resulta en grandes formaciones con la aparición de estalactitas o gases sublimares congelados en el tiempo.
Según la temporada, en cuatro lugares de clima frío en América del Norte, la compañía crea castillos de diferentes tamaños que se construyen a lo largo de tres a cuatro semanas y que se mantienen durante aproximadamente seis a ocho semanas más adelante. Lo que puede parecer como una actividad simple (después de todo, es sólo hielo y agua) es en realidad una compleja orquestación, no muy diferente de la arquitectura más tradicional, que implica la cuidadosa consideración de una serie de factores estratégicos y específicos del sitio.
Ice Castles comenzó en 2009 luego de que el fundador de la compañía, Brent Christensen, celebrara la decisión de mudarse junto a su familia desde California a Utah mediante la construcción de una elaborada pista de patinaje y un tobogán en su patio trasero. Al hablar sobre los orígenes del concepto, Christensen dice que fue "puramente por curiosidad e intriga. Cuanto más jugaba con salpicar y congelar agua, más fascinante era".
Esta referencia a rociar y congelar agua lleva a un punto importante: a diferencia de otras estructuras de invierno que utilizan bloques de hielo o un método de talla, Ice Castles se hacen a través de un proceso más orgánico en el que un andamio inicial actúa como una guía para la acumulación gradual de hielo que añade lentamente el peso, volumen, y la integridad estructural de los castillos resultantes.
"Las ubicaciones", dice Christensen, "son elegidas en base a varios criterios: clima-frío, relativa proximidad a un núcleo de gran población (menos de dos horas de distancia), un defensor local (como un centro de esquí, cámara de comercio, o el propietario de la propiedad), y suficiente espacio de estacionamiento, recursos de agua y drenaje." De forma adicional, una vez que se selecciona un sitio, el diseño en sí se ve influenciado por la topografía, la vegetación, el aparcamiento y el flujo de tráfico, y la exposición al sol. Esta temporada se encuentran en Midway, Utah, Eden Prairie, Minnesota, Lincoln, New Hampshire, y Edmonton, Alberta, Canada.
Para preparar cada sitio, se coloca césped con la tubería de riego y el cableado eléctrico que le permite a los castillos crecer y también para la iluminación que se fijará y se congelará dentro de las formaciones. Los andamios de celosía se crean con carámbanos que crecen en la noche en "granjas de carámbanos" especiales, a menudo tantos como 10.000 a la vez. La base de cada castillo es de aproximadamente 3 - 4,5 metros de espesor y la estructura crece en etapas de incrementos de 60 a 90 cms.
"Fusionamos los carámbanos en las formaciones , vertical y horizontalmente, donde tenemos la intención de que las torres y muros crezcan", dice Christensen. "Empezamos en el suelo y mientras cada capa recoge más hielo y se espesa, se añade una capa sobre otra hasta que las estructuras crecen hacia arriba 6-10,5 mts. de altura." Debido a que el proceso implica que hielo se añada a más hielo, Christensen dice que el método no es muy diferente a la soldadura. "Dado que el proceso de añadir nuevos carámbanos implica salpicar agua, todo se derrite y se congela junto, haciendo que las estructuras sean básicamente una pieza sólida de hielo."
Mientras cada castillo comienza con una especie de planos, y la acumulación gradual permite grados de control, el proceso es en última instancia uno orgánico: "la madre naturaleza siempre tiene la última palabra", como lo pone Christensen. En el pasado, la compañía experimentó con otros materiales que se utilizaban para dar aún más forma las construcciones, pero Ice Castles ha descubierto que el hielo sólido tiene la mayor integridad estructural. Ya que estos son creaciones al aire libre, susceptibles a los caprichos del clima cambiante, los castillos constantemente están siendo reconstruidos durante toda la temporada, pero el diseño general sigue siendo el mismo. Y aunque se incorporan diferentes elementos (tales como toboganes, cascadas y fuentes) de lugar a lugar y año tras año, todos los castillos comparten una característica apariencia fluida.
Los castillos pueden ser bastante grandes (el ejemplo actual en Midway es de aproximadamente 4.000 m2), y pesan hasta 11.300 toneladas. Tanto hielo y carámbanos puede sonar desalentador, pero las leyes de la física respaldan una estructura estable y segura. Los carámbanos se derriten desde el punto más pequeño hasta el más grande, y debido a que los castillos son enteramente de hielo fijo sobre hielo, sin materiales oscuros como un techo, la fusión se produce de una manera lenta y estable, sin riesgo de que un carámbano se afloje en su base y que caiga sobre los visitantes debajo.
Desde que comenzó en el 2009, más de 750.000 personas han visitado los castillos de hielo, y este año, si el tiempo lo permite, la gente puede visitar los cuatro lugares mencionados hasta principios de marzo.