Descripción enviada por el equipo del proyecto. En mayo pasado, recibí una interesante invitación. En el área metropolitana de Seúl hay una ciudad satélite, un pequeño centro urbano, dentro del contexto de Korea, de 700.000 habitantes. La ciudad decidió invitar a varios arquitectos y artistas internacionales para participar en el diseño de un nuevo parque. El proyecto, “Parque Público de las Artes de Anyang”, se relaciona con el concepto de parques de arte y arquitectura en Japón, dentro de los cuales el más grande es el recinto para la Trienal de Arte Echigo Tsumari, en el área de Niigata.
Siguiendo el ritmo de vida y estilo de coreanos, los tiempos eran bastante ajustados. El desarrollo del proyecto partió cuando aún se estaba escogiendo el sitio. Los bocetos debían ser enviados al día siguiente. Dado el apuro, tuve dificultades para incorporar los constantes cambios en mis dibujos. Por suerte, pude re hacer varios de los detalles más importantes después, mientras trabajaba en el sitio de la construcción. Trabajar con los coreanos, dejando de lado falta de tiempo, fue muy placentero, gracioso a veces.
El parque esta situado en un valle de río. El edificio mismo, esta en la cima de un pequeño monte en el bosque, junto a un camino que lleva a las montañas al final del parque. El espacio principal es un gran cubo de acero. Cuatro habitaciones de madera están conectadas a este espacio en los distintos pisos. En cada una de estas habitaciones está presente un elemento de la naturaleza: agua en el sótano, tierra en el patio, fuego en el primer piso y aire en el ático.
En lo práctico, la idea de este trabajo es ofrecer un simple albergue donde los excursionistas pueden descansar, disfrutar de su merienda, mirar por sobre los montes o prender una vara de incienso. Para este propósito, el artista noruego John Roger Holte diseño una plataforma/almacén para el incienso, de hormigón coloreado. Este hábito se relaciona con la tradición del valle como un refugio budista. Solía haber varios templos en el área de los montes, de los cuales solo algunos se mantienen hasta hoy. De todas maneras, me dijeron que hay rituales shamanes aún más viejos, cuyos servicios están disponibles si se requerían.
Los materiales principales son acero y madera. El concreto se usó en el sótano y las fundaciones. Las aberturas están cerradas con vidrio laminado, y los pisos con jade y gravilla de mármol, distintos tipos y colores de piedra en cada espacio.
Seúl es una inmensa área urbana con un acelerado crecimiento, el cual es tangible en sus alrededores. Ruidos constantes, autopistas saturadas, infinitas líneas de bloques de apartamentos clonados y el siempre presente smog gris, crean un duro medio para los seres vivos. Espero que este pequeño edificio en el límite entre la ciudad y el bosque entregue una atmósfera de contraste. Si alguien algún día, caminando dentro de su ajetreo diario, decide parar, sentarse y dejar que el silencio tome el control dejando la mente vagar, esta obra ha alcanzado su fin.