Descripción enviada por el equipo del proyecto. La fachada en este proyecto intenta transformar la energía solar en electricidad a través de paneles que generan un contorno singular en el edificio. Sus muros exteriores están diseñados como una onda continua de paneles de cristal plegados y su planificación conceptual tuvo como resultado más de 350 patrones distintos de cortes de vidrio. El perímetro de cada planta varía entonces con el avance y retranqueo de cada superficie.
En la planta baja del edificio, orientado hacia el norte, se dispuso una recepción con techos altos y un auditorio; además se incluye un restaurant con vistas panorámica a los jardines que lo rodean. Desde el segundo al séptimo nivel hay salas de investigación, y en el octavo están las oficinas ejecutivas.
Para presentar una imágen clara, luminosa y transparente del edificio y para introducir el verde al interior, los muros de cristal se complementan con persianas verticales móviles para evitar la luz directa desde el norte.
Los espacios que quedaron a lo largo de la fachada ondulante fueron destinados a lugares de descanso y de reunión, que son justamente espacios que entregaban mayores libertades para usar eficazmente los espacios irregulares que el muro dejó en cada piso.