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Arquitectos: Fernandes Atem Arquitetos
- Área: 239 m²
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Fotografias:Felipe Petrovsky
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Proveedores: Biancogres, Cerâmica Portinari, Deca, Fortstone Brazil, Mosaicos Colares, Tramontina
Descripción enviada por el equipo del proyecto. La solución aprovecha la posición privilegiada al borde del condominio, en un lote de esquina, lo que permitió que la casa estuviera abierta hacia el área externa del lado norte. La casa está marcada por la horizontalidad de la losa de hormigón visto, la reducida paleta de materiales y la generosidad de las aperturas, que buscan ampliar el horizonte y acercar el disfrute de la naturaleza (paisaje, luz y viento) a la vida cotidiana.
Las áreas sociales (oficina, sala, comedor y cocina) están integradas espacialmente, divididas únicamente por muebles. La paleta de materiales favoreció la neutralidad para que los muebles y objetos resaltaran. En la cocina y otras zonas húmedas, las baldosas hidráulicas aportan personalidad y ayudan a proteger del sol poniente. La casa se destaca en el contexto del condominio por ser de una sola planta. La losa, que aporta unidad y refugio, se ha ampliado hasta los límites permitidos para crear la máxima sombra. La protección la proporciona una capa de arcilla expandida. Se ahuecó una sección para permitir la entrada de luz y viento. Por encima de él, sólo las claraboyas y el refugio de equipos (máquinas y tanque de agua) aterrizan suavemente.
Los espacios íntimos de la casa fueron diseñados con la misma intención que el resto de zonas. El espacio sigue siendo protagonista. El mobiliario es austero, minimalista. La luz, tanto natural como artificial, transforma los colores a lo largo del día. Los baños, situados en el centro de la planta, se iluminan a través de lucernarios. La losa de hormigón aparece en todos los espacios.
