- Área: 200 m²
- Año: 2009
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Fotografías:Raúl Candales
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El proyecto consiste en la renovación interior de un departamento de 100 m2 con una gran terraza en un edificio antiguo en el corazón del barrio tradicional de Barcelona. La casa tiene una planta muy profunda y estrecha y solo dos fachadas en sus extremos, una de las cuales da a la calle y la otra a la terraza de un patio interior.
El propósito es una intervención arquitectónica integral del espacio con dos metas principales: maximizar la iluminación y ventilación de las fachadas eliminando particiones innecesarias, y obtener una nueva distribución que contiene todos los usos requeridos de su joven propietario: un dormitorio en suite, un dormitorio y baño de visitas, un estudio de trabajo, una cocina y un comedor para las fiestas y encuentros.
Para maximizar la iluminación fue necesario, para lograr una intervención estructural que eliminara por completo las partes internas y un muro estructural ubicado justo detrás de la fachada posterior, punto clave para lograr un uso óptimo de la luz.
Además, debido a la dificultad geométrica de la vivienda, todas las diferentes funciones podían ser acomodadas a través de una distribución flexible y no convencional que permite la unión y separación de espacios y hasta cambiar su función, dependiendo de la ocasión. La nueva distribución consiste en una larga área común diáfana y espaciosa, que va continuamente de fachada a fachada, y una caja privada semi-cerrada que contiene el dormitorio principal y el baño de visitas.
El area común está formado por el vestíbulo, el comedor, la biblioteca, el estudio y el estar en la fachada posterior, y la cocina en la fachada anterior. Todas estas áreas están alineadas a lo largo de un muro longitudinal hecho de ladrillo sólido hecho a mano.
El baño se encuentra entre armario alto, con la doble función de armario para el vestíbulo y el baño, y un largo núcleo de madera que contiene los dos baños, convirtiéndose en un mueble con estantes en el área de estudio. Entre estos muebles se esconden dos grandes puertas corredizas de madera que permite la independencia de dos espacios diferentes: el baño, que está separado del área común, y la parte del estar que contiene un sofá-cama, que permite que se use eventualmente como dormitorio de invitados.
El núcleo de Madera es un marco de profunda elaboración para los baños. Los tabiques transversales se resuelven con puertas correderas de vidrio translúucido para permitir la conexión de iluminación, ventilación y vistas entre los espacios. En el interior, todas las superficies, incluyendo el techo y el piso, están cubiertas de mosaicos color Bisazza y espejos. Los baños e instalaciones se encuentran suspendidos o de forma independiente para constribui a la sensación de transparencia. El resultado es un juego de brillos y reflejos que multiplican la luz y que convierten al baño en un espacio luminoso y sofisticado en contraste con el resto de la cálida y sobria vivienda.