El estado actual del Faro Monumental de La Serena, Chile, es de un avanzado deterioro producto de la acción del mar, los vándalos y la poca mantención.
Pero su situación podría revertirse: la estructura fue declarada Monumento Nacional en calidad de Monumento Histórico, paso imprescindible para lograr su definitiva restauración.
Desde 2010 que el municipio tiene listo el proyecto para reparar la estructura. La idea es obtener un crédito blando de $800 millones a través del fondo para la puesta en valor patrimonial que otorga el BID.
Para eso, la Dirección de Arquitectura del MOP realizó un estudio para determinar el daño de El Faro. Los principales deterioros los causa la humedad, que destruyó la pintura interior y exterior, y afectó también la enfierradura. Además, su terraza colapsó por la constante acción del mar, que en cada crecida socavaba la arena y daña el hormigón.
El documento establece que “la mayor parte de la estructura está en buenas condiciones y no existe riesgo de colapso de la misma. Desde el punto de vista estricto de la especialidad estructural, lo más conveniente es reparar la estructura y no reconstruirla”.
El proyecto del municipio, aparte de las reparaciones de pintura, fierros y hormigón, modifica partes esenciales en la estructura de 30 metros de alto.
El techo del primer nivel será de vidrio, para permitir la entrada de más luz; se habilitará un ascensor hasta el punto más alto y habrá escaleras para la terraza que está sobre el primer piso.
En el interior habrá una oficina de información turística, se construirán baños y una cafetería para los visitantes. El plan para el entorno considera juegos, restaurante y una piscina.
La estimación del municipio es que la recuperación de la estructura estará lista hacia fines de 2012 o en 2013. No obstante, esa será sólo una primera parte, pues existe un plan maestro que incluye la recuperación de todo el sector aledaño a El Faro.
En el lugar se renovará la costanera con ciclovías, un espejo de agua rodeando el recinto, juegos infantiles, una rampa de acceso por sobre la Avenida del Mar, piscina pública, un restaurante y un sector para puestos de artesanía. La idea es generar un espacio para desarrollar actividades masivas junto al mar. Todo esto recién hacia 2020.
Vía: Plataforma Urbana
