El arquitecto Jean Nouvel, bastante radical entre los arquitectos de hoy, sorprende continuamente y de igual forma tanto a los arquitectos en práctica como a los transeúntes sin estudios con su gran manejo de la forma, los patrones, los materiales y los colores.
Actualmente se discute sobre su Pabellón de la Galería Serpentine de Londres y los departamentos recién construidos de Chelsea en Nueva York. Nouvel es conocido por la creación de los edificios más llamativos e innovadores.
Uno de sus primeros edificios, la Fundación Cartier en Paris en el 1994, utiliza el mismo concepto de la transparencia y el rigor de la fachada que las estructuras que ha diseñado últimamente. Siendo un lugar que es sede de exhibiciones de arte contemporáneo y graffitis, tiene un juego entre interior y exterior muy apropiado, ya que crea apertura que invita a la gente a experimentar el edificio de lejos y de cerca.
“Reproduciendo las líneas de la avenida, los tabiques de vidrio permiten a los transeúntes admirar la extraordinaria interacción entre la estructura y la naturaleza que caracteriza el edificio “, explica Nouvel.
Con la extensión de la fachada de vidrio en los bordes de hormigón del edificio, hay una fusión de los espacios interiores y exteriores que establece una experiencia inigualable. El jardín de flores silvestres está amurallado desde la ciudad en una extensión de las paredes de vidrio, unificando y separando a la vez el jardín de la ciudad.
Los árboles del jardín se leen detrás de una pared transparente, que se suma a la ambigüedad de la transición desde el interior hacia el exterior. Un cedro del Líbano “Árbol de la Libertad” fue plantado por el poeta François-René de Chateaubriand en 1823, que surge de una maceta monumental directamente detrás de la pared.
Teniendo en cuenta los elementos históricos y la belleza natural preexistente, se trabajó con el exterior convirtiéndose en la obra más destacada de Nouvel. Esto se incorpora en las ventanas de 8 metros de altura se separan la galería del exterior, que es totalmente extraíble en el verano permitiendo así una fusión completa del espacio.
Nouvel fue cuidadoso en el diseño de cada fachada. La trasera es igual de prolija que la del frente, con el espacio de oficinas que da al jardín y la caja de ascensores que ha diferencia de los ascensores convencionales, suben hacia la parte superior del edificio de una manera original, sin el uso de cables y dando completamente hacia el exterior.
Otro concepto importante en este diseño es la desmaterialización, que desata una serie de complejidades a través de las propiedades visuales del vidrio y el acero. El edificio se compone de 650 toneladas de acero, y 5.000 metros cuadrados de vidrio.
En la actualidad, ofrece espacio para una fundación de arte contemporáneo, la sede corporativa, una galería de exposiciones, oficinas y un estacionamiento, teniendo en total 6.400 metros cuadrados y 100 millones de dólares (una vez terminado).
También tiene áreas grandes y flexibles que se utilizan como salas de exposiciones, lo que se hace posible gracias a las vigas estructurales que cubren una luz de 16 metros.
En palabras del propio Nouvel, “es una arquitectura basada por completo en la liviandad, vidrio y acero delicadamente tejido. Una arquitectura que juega con la difuminación de los límites de los materiales y la representación de la lectura de un volumen sólido superfluo, en una poética de la ambigüedad y la evanescencia. ”
Arquitecto: Jean Nouvel Ubicación: Paris, France Año Proyecto: 1994 Referentes: Jean Nouvel, Thomas A. Kute Fotografías: Ambroise Tezenas, Paris Architecture, Jean Nouvel, David Gallagher, Rodrigo Abbade, Tim Brown Architects