-
Arquitectos: Diego Labbé + Nicolás Bowen + Cristián Morales; Diego Labbé, Nicolás Bowen, Cristián Morales
- Área: 163 m²
- Año: 2008
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Situada al sur de Chile, específicamente en la ciudad de Puerto Varas, X región. El proyecto nace de la búsqueda y detección de los factores que tienen relación con la idiosincrasia de la gente que habita el sur y sus contextos naturales. El sur de Chile da cuenta de múltiples formas de vida, actos que permiten dilucidar un proyecto. El que vive en el sur, es capaz de adaptarse a las condiciones del clima con la intimidad del hogar. No es casualidad que existan muchas casas en el sur donde el espacio central de reunión y centro de actividades comunes sea la cocina, donde el fogón, o el horno, generan instancia de compartir y estar. Esta condición fue relevante para el equipo; el desarrollo de un centro articulador que concentre las actividades principales de la casa (cocina y estar), cuya función es la de distribuir hacia dos zonas adyacentes: la zona privada o pieza principal, y la zona de uso público (piezas para invitados).
Uno de los principales requerimientos del cliente correspondía a la flexibilidad que la casa pudiera tener, debido a que sus 3 hijos universitarios vivían fuera de la ciudad. Ellos reciben durante el año variadas visitas de amigos, y sobre todo la de sus hijos. Esta condición marcó la decisión de plantear 3 zonas principales:
1. Sector Dormitorio Principal / Baño Principal / Sauna
2. Sector Cocina / Comedor / Estar / Acceso / Loggia (espacio articulador)
3. Sector Dormitorios Visitas / Baños Visitas
Esta secuencia se conecta por medio de un eje principal de circulación. Los espacios evolucionan en sus alturas, donde la mayor altura de la casa se presenta en el espacio de la cocina y living principal.
Utilizar el elemento agua como directriz de diseño fue una principal motivación del equipo. El roce del agua se hace latente en el espíritu de la casa, ya sea por medio del revestimiento de tejuelas de alerce, como en las aguas de moderada pendiente que dejan deslizar las aguas hacia los suelos, sin conducirlas por ninguna especie de canal. Sin embargo, se ejecutaron circulaciones exteriores a modo de corredores (que funcionan como alero para defenderse de la lluvia y el viento frontal del norte), y el acceso principal que trabaja como zaguán. La idea de vivenciar el agua, el sonido y su natural caída proveniente de las extensas aristas del techo, se hace verídica al momento de ocupar un espacio en estos recintos semi-abiertos.
El proyecto entrega una nueva idea de congeniar la forma de vida sureña y su idiosincrasia como fenómeno social por medio de la articulación de espacios categóricos y elementales, ofreciendo como solución al cliente una casa de espacios simples, pero totalmente funcionales y claros con respecto a un programa definido por ellos mismos. Un espacio central, recintos privados y públicos, una cocina jerarquizada como centro neurálgico y de mayor altura en términos de espacio, vistas enfocadas hacia un paisaje natural y una volumetría diseñada para que el agua roce las tejuelas de alerce marcando su historia, son el resultado final de un ejercicio austero y honesto.
