- Área: 2900 m²
- Año: 2008
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Fotografías:Pablo Blanco Barros
Descripción enviada por el equipo del proyecto. La propuesta arquitectónica pone énfasis en la integración de la comunidad a la vida escolar, es decir, cómo la arquitectura pública debe ser un medio entre la relación espacial del interior y el contexto urbano paisajístico. Para esto el edificio propone un atrio cubierto en doble altura, marcado por pilares diagonales, transparente en un sector, que divide programáticamente los espacios educativos , disponiendo en un primer nivel los espacios públicos para la comunidad, de tal forma que visualmente se relaciona la vida urbana con el interior por un conducto que marca una diagonal visual exterior- interior.
El programa de arquitectura además de contener los espacios típicos para el desarrollo de la actividad educacional, tiene la particularidad de ser un centro de educación técnica para la comunidad, que considera recintos de Talleres de Repostería y Maderas que poseen un gran valor dentro del programa, y necesarios para la zona de fuerte raigambre forestal y de servicios.
Otorgar un espacio público frente a la fachada principal y de ingreso al Liceo, sin duda es una búsqueda a un nuevo uso del espacio público en el poblado, pues nace una nueva plaza además de la principal, que contribuye a conformar un lugar de apoyo a las actividades del Auditorio y Biblioteca que no sólo son parte del establecimiento educacional, sino también son parte de la comunidad, la que puede disfrutar de ellos el fin de semana. La morfología de este lugar es triangular por el giro de la fachada y una continuidad de pilares paralelos a la calle, todo cobijado por una cubierta elevada y con un diseño urbano que considera pavimentos, bancas y luminarias.
El desnivel propio del terreno fue una condicionante para la propuesta de los patios interiores, los cuales van desarrollándose en ascenso y a su vez creando distintas categorías, como son el patio de ingreso, de juegos y cívico, ordenando la estructura del liceo mediante una planta simple y clara en su lectura.
Por otro lado, y como innovación al tema energético tan escaso a nuestro país, se planteó que el proyecto de calefacción, funcionara mediante una caldera de biomasa, la cual ocupa como combustible el aserrín, tan abundante en esta zona maderera, que consiste en material de desecho orgánico de alto alcance y bajo costo. Esto contribuye notablemente a la sustentabilidad del equipamiento del Liceo y a la reutilización de residuos por sobre la adquisición de combustibles caros y escasos.
La propuesta arquitectónica pone énfasis en la integración de la comunidad a la vida escolar, es decir, cómo la arquitectura pública debe ser un medio entre la relación espacial del interior y el contexto urbano paisajístico. Para esto el edificio propone un atrio cubierto en doble altura, marcado por pilares diagonales, transparente en un sector, que divide programáticamente los espacios educativos , disponiendo en un primer nivel los espacios públicos para la comunidad, de tal forma que visualmente se relaciona la vida urbana con el interior por un conducto que marca una diagonal visual exterior- interior.
El programa de arquitectura además de contener los espacios típicos para el desarrollo de la actividad educacional, tiene la particularidad de ser un centro de educación técnica para la comunidad, que considera recintos de Talleres de Repostería y Maderas que poseen un gran valor dentro del programa, y necesarios para la zona de fuerte raigambre forestal y de servicios.
Otorgar un espacio público frente a la fachada principal y de ingreso al Liceo, sin duda es una búsqueda a un nuevo uso del espacio público en el poblado, pues nace una nueva plaza además de la principal, que contribuye a conformar un lugar de apoyo a las actividades del Auditorio y Biblioteca que no sólo son parte del establecimiento educacional, sino también son parte de la comunidad, la que puede disfrutar de ellos el fin de semana. La morfología de este lugar es triangular por el giro de la fachada y una continuidad de pilares paralelos a la calle, todo cobijado por una cubierta elevada y con un diseño urbano que considera pavimentos, bancas y luminarias.
El desnivel propio del terreno fue una condicionante para la propuesta de los patios interiores, los cuales van desarrollándose en ascenso y a su vez creando distintas categorías, como son el patio de ingreso, de juegos y cívico, ordenando la estructura del liceo mediante una planta simple y clara en su lectura.
Por otro lado, y como innovación al tema energético tan escaso a nuestro país, se planteó que el proyecto de calefacción, funcionara mediante una caldera de biomasa, la cual ocupa como combustible el aserrín, tan abundante en esta zona maderera, que consiste en material de desecho orgánico de alto alcance y bajo costo. Esto contribuye notablemente a la sustentabilidad del equipamiento del Liceo y a la reutilización de residuos por sobre la adquisición de combustibles caros y escasos.