Hace algunas semanas les mostramos la historia del español que construye una catedral con sus propias manos a las afueras de Madrid. Hoy nos encontramos con una historia parecida: una serie de "catedrales" subterráneas que han sido excavadas por un sólo hombre en el norte de Nuevo México.
Ra Paulette, estadounidense de 67 años -desertor de la Universidad y dado de alta de la Marina de los Estados Unidos- ha esculpido el espacio bajo tierra usando sólo herramientas de mano... y su obra se ha comparado con el trabajo de grandes artistas como Goldsworthy, Heiser y Smithson.
Más información, imágenes y el trailer del documental nominado al Oscar 2014, a continuación.
Ocultas bajo el desierto del norte de Nuevo México, las surrealistas "catedrales" del visionario Ra Paulette han sido esculpidas a mano con sólo una piqueta y una carretilla, alcanzando un total de 14 cuevas.
"Al excavar he descompuesto todos los movimientos posibles en sus partes más simples, para volver a unirlos en patrones más eficientes", dice al tratar de explicar su "proceso. "Al igual que una bailarina, yo siento el cuerpo y su movimiento de una manera consciente. Yo lo llamo 'la danza de la excavación', y es el secreto de cómo este viejo ha conseguido llegar hasta este punto".
Antes de comenzar este inusual trabajo, Paulette estuvo muy cerca de convertirse en un vagabundo; desertó de la universidad y fue dado de alta de la marina estadounidense, lo que lo obligó a viajar por el país buscando trabajos ocasionales como cartero, guardia, portero y granjero, viviendo sin electricidad ni agua potable en las montañas de Tennessee.
En 1985 se trasladó a la zona de Dixon para cavar letrinas y trabajar en la construcción de pozos y muros de piedra, lo que le dio la idea y la habilidad para empezar algo más grande que dejar en este mundo. Meticuloso, obsesivo y solitario, comenzó entonces su obra tan sólo acompañado por su perro.
Actualmente parte de sus cuevas están a la venta para luchar contra la continua falta de fondos. Una de ellas es la cueva "Árbol de la bondad humana" (Tree of Human Kindness), que se ubica entre Santa Fe y Taos y tiene un tamaño de 84 hectáreas.
Referencia: MessyNessy / Fotografías Vía Ra Cave Digger