Solamente en el año 2013 alrededor de un millón de personas han escapado de Siria arrancando de un conflicto civil que lleva más de dos años. El número total de refugiados sirios supera los 2 millones de personas, un número sin precedentes y una inquietante realidad que ha puesto a los países anfitriones bajo una enorme presión de infraestructura.
Afortunadamente los países anfitriones tienen un protocolo a seguir y los Manuales de las Naciones Unidas pueden ser consultados y utilizados para informar acerca de los modos adecuados para enfrentar los problemas de planificación del campamento. La tierra es negociada y se establece un diseño de cuadricula, y aunque este método es bastante meticuloso, es una solución con tiempo de caducidad.
O quizás sería la solución, si el problema en realidad fuese temporal.
Los campamentos no acaban junto con la finalización de los noticieros. El promedio en vida en un campamento varía entre los siete y diecisiete años (los informes varían), llegando incluso a durar más que eso. Se trata de un campo de cultivo de enfermedades y violentos delitos, y a medida que los campamentos se hacen más grandes y antiguos, las denuncias de violencia contra mujeres aumenta desproporcionadamente. Esta tendencia no pasa desapercibida; Architecture for Humanity y sus socios están recaudando fondos para un proyecto que pretende crear una “serie de espacios acogedores, seguros, que puedan actuar como puntos nodales en los campamentos.” El proyecto es un excelente primer paso y debería considerarse como un precedente para una intervención arquitectónica en los asentamientos de refugiados.
De hecho, si hay alguien calificado para considerar a largo plazo la reconstrucción, en situaciones posteriores a un desastre, es un arquitecto. Y si hay alguien con la obligación moral de proporcionar un refugio seguro, accesible y sustentable, son sin duda los arquitectos.
Desafortunadamente, cuando se mira la sustentabilidad de campos de refugiados, hay un amplio conjunto de (fallidos) modelos de referencia. El cuarto aniversario del catastrófico terremoto de Haití se acerca, y al menos los infames campamentos de Haití han desaparecido del paisaje. Pero mientras el número de personas en estos establecimientos ha decaído de manera significativa, los desalojos forzados por parte del gobierno empeoran las mejoradas condiciones entregadas en otros lugares. El mensaje es claro: los desastres de gran escala requieren soluciones a largo plazo.
Dada la experiencia urbanística de arquitectos (así como el conocimiento de investigaciones recientes sobre cómo las ciudades temporales crecen con éxito), quizás sean los únicos calificados para hacer una diferencia duradera. El diseño de asentamientos "temporales" no es una tipología tan fuera de lugar que requiera una nueva forma de pensar - simplemente llama a agregar conocimiento sólido al respecto.
La consideración de la movilidad en las propuestas de diseño, por ejemplo, podría ser la solución a la "permanencia no permanente" de los campos de refugiados. Dado que los ejércitos no pueden acoger a los refugiados de forma indefinida, un campamento que podría ser desplazado dentro y fuera de un área con relativa facilidad podría ser atractivo para las distintas partes involucradas.
Una idea de hospital móvil desarrollada por Hord Coplan Macht + Spevco, utiliza los camiones que traen suministros como la misma estructura final. En el caso de los campos de refugiados, este es un concepto que podría ser adaptado para incluir espacios residenciales. Los contenedores también pueden ser reutilizados fácilmente para acomodar a las familias.
En el año 2009, Architecture for Humanity Atlanta prestó su experiencia en diseño para desarrollar una clínica flotante de salud móvil llamada Hope Floats (esperanza en flota) en Lagos, Nigeria. El proyecto, ya está instalado y en uso, ha indicado ser un gran éxito, que sin duda podría ser replicado y desarrollado progresivamente. ¿Podríamos ver algún día las comunidades flotantes de refugiados? El refugio en agua podría disminuir la carga de suelo que tienen algunos de los países de refugio, incluso podría convertirse en una solución más permanente para los propios refugiados.
Propuestas de alta tecnología también podrían generar soluciones mientras que al mismo tiempo satisfacen el apetito de los arquitectos por la innovación. Por ejemplo, la firma holandesa DHE desarrolló una impresora 3D de (“KamerMaker”) que es capaz de imprimir una habitación completamente a partir de materiales reciclados. Aunque cara, es una opción viable para el diseño post-desastre. Por el momento no vale la pena descartarla, considerando que la impresión 3D se esta volviendo popular y cada vez se hacen más accesibles las formas para imprimir.
Por supuesto, sobre todo en situaciones de ayuda (cuando no hay mucho dinero para derrochar), la factibilidad económica es una gran preocupación.
IKEA recientemente colaboró con el ACNUR para diseñar un nuevo tipo de albergue para refugiados. Si bien el diseño cuesta inicialmente el doble, dura mucho más tiempo que las carpas que se encuentran actualmente en uso (estas deben ser reemplazadas cada seis meses), y es finalmente una solución más barata. Además ofrece un mejor control de temperatura, energía solar para la luz de la tarde, y un poco más de privacidad para los habitantes. Si bien no es un "hogar", es una muy buena alternativa.
Desafortunadamente, imaginar e implementar soluciones arquitectónicas en campos de refugiados está lleno de dificultades. Los campamentos se mantienen de alta densidad para así reducir la cantidad de espacio necesario para mantener la seguridad, así como para simplificar la distribución de los recursos. También sufren de un marco legal muy restrictivo, en gran parte debido a su tensa naturaleza política. Y por supuesto, las soluciones deben ser implementadas de manera rápida y eficiente. Algo que, por supuesto, es mucho más fácil decir que hacer.
Pero los arquitectos nunca han sido los que se alejan de complejos problemas de diseño – y hay una inmensa oportunidad para la innovación arquitectónica en el diseño de “hacerlo bien”.
Es hora de ampliar los límites y proponer soluciones que vayan más allá de la carpa. ¿Están los arquitectos listos para el reto?
Si te interesa este tema te invitamos a revisar el post Un Campo de Refugiados es una Ciudad / 20 de Junio: Día Mundial de los Refugiados.