- Área: 1677 m²
- Año: 2008
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Fotografías:Diego Opazo
El proyecto unifica tres objetivos: la construcción de un edificio dotacional, la ejecución del acabado superficial de la plaza y bajo ambos espacios la construcción de un aparcamiento subterráneo que da servicio a la importante zona comercial del barrio.
El espacio donde se ubica el edificio es muy singular por encontrarse dentro de un barrio con gran densidad de población y escasos equipamientos, por lo que se genera un importante punto de vida urbana, inexistente hasta la construcción del edificio.
Esta aportación dota al barrio de un Centro Social con diferentes usos que motivan que el espacio urbano cobre vida, principalmente por los propios ciudadanos asistentes a la plaza, al centro socio-cultural y a los espacios públicos que el propio edificio genera.
Entre el edificio y la calle Avenida de Novelda, eje comercial del barrio, se genera una plaza - jardín que se delimita al norte por bloques de viviendas y al sur con el recinto del colegio Francesc Cantó.
Las características del emplazamiento y el condicionante de la malla estructural del aparcamiento subterráneo son el origen del proyecto. El edificio se organiza con una geometría muy precisa de elementos modulados según la trama del sótano, con una composición de volúmenes que crean una serie de espacios libres en planta baja, que sirven a su vez para articular los jardines y equipamientos que rodean el edificio.
El Centro Social consta de tres bloques rectangulares maclados perpendicularmente con un bloque longitudinal de planta baja, entre ellos se crea un corredor que enlaza visualmente la plaza situada frente a la Avenida de Novelda con el jardín situado al oeste.
En sentido transversal, se originan unos patios abiertos orientados al sureste que confieren transparencias hacia el colegio Francesc Cantó.
Este juego de volúmenes hace que el conjunto sea compacto al exterior, con gran riqueza de espacios cubiertos y patios interiores, los cuales ampliarán el espacio de uso público en horario de utilización del centro, y permanecerán cerrados el resto del tiempo.
El diseño de las fachadas combina una alternancia de grandes planos macizos y módulos acristalados, que confieren a la planta baja una carácter cerrado hacia el exterior. En el bloque longitudinal de planta baja se crean unos patios interiores sobre los que se abren los espacios interiores. En el piso primero se abren grandes ventanales; en cambio los situados en los extremos se protegen del soleamiento mediante una celosía formando bandas horizontales de tableros fenolizados, mientras los testeros son ciegos.
Los materiales empleados exteriormente son muros de cerramiento con acabados de estuco de cal y carpinterías metálicas acristaladas. Interiormente la compartimentación se ha previsto con tabiquerías ligeras y desmontables.
