- Año: 2010
Precedentes
En 1960, Club Med se construyó en el extremo oriental de la Península Ibérica en uno de los rincones más expuestos y con más viento de la nación. Club Med fue construido como un centro de vacaciones privado con 400 habitaciones para alojar a alrededor de 900 visitantes durante el verano. La vida en el lugar era primitiva y tenía la intención de fomentar una relación con la naturaleza. Este proyecto de asentamiento es considerado como uno de los ejemplos más notorios del movimiento moderno en la costa mediterránea.
Con el surgimiento de la democracia y la conservación ecológica, Cap de Creus fue declarado Parque Natural en 1998. Al lugar, incluyendo los alrededores del Club Med, se le dio el más alto nivel de protección por su valor geológico y botánico excepcional. En el verano de 2003, el Club Med fue cerrado de forma permanente y en 2005, la propiedad de 200 ha fue adquirida por el Ministerio de Medio Ambiente español, activando un proyecto de restauración durante los años 2005 y 2007.
En 2009 y 2010, el asentamiento fue "deconstruido", reviviendo su dinámica ecológica y generando un innovador proyecto paisajístico y de uso público. De esta forma, el plan se convirtió en el mayor proyecto de deconstrucción y restauración de la costa del Mediterráneo.
Acercamiento
El proyecto está relacionado con identificar, revelar y finalmente, transformar, para adaptarse a lo que ya existe. Revelar y celebrar el paisaje "real" y sus cualidades específicas.
A diferencia de lo abstracto, que intenta neutralizar y establecer la universalidad del artefacto, lo literal, lo real, se conecta con la historia, entregando el aura de autenticidad por la repetición, la reflexión o la crítica. Ian McDougall.
En efecto, el objetivo del proyecto no era construir un paisaje, sino que concebir las condiciones para vivir su experiencia. Para ello, el proceso involucró un profundo reconocimiento del sitio y precisar la cartografía en el lugar. Durante el proceso de 5 años, incluyendo 14 meses de trabajo, los diseñadores caminaron más de 200 kilómetros en terreno, tomaron y estudiaron más de 15.000 imágenes y recibieron hasta 50 especialistas en diferentes campos relacionados con la restauración de la naturaleza, en la búsqueda de formas de optimizar la deconstrucción, la naturaleza dinámica de la regeneración y la valorización social. El encargo era bastante abierto, lo que entregó la flexibilidad necesaria para integrar los descubrimientos hechos después de la de-construcción.
Constructivamente se adoptó un enfoque minimalista, reduciendo los materiales al acero corten, por su integración paisajística y su resistencia a la exposición del mar, y el uso de unos pocos detalles consistentes repetidos a través del sitio.
Constructively a minimalist approach was taken, reducing materials to those on site plus Cor-ten steel, for its landscape integration and its resistance to sea exposure, and using only few consistent construction details repeated through the site. ‘Robustness’ for a landscape that accepts little domesticities.