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Arquitectos: Adhoc Arquitectura y Territorio, Ecoproyecta
- Área: 472 m²
- Año: 2009
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Fotografías:Gabriel López
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El proyecto de diseño de ocho nuevas aulas para la Facultad de Economía y Empresa de la Universidad de Murcia, fruto de la colaboración entre Ecoproyecta y Adhoc msl, ha sido determinado desde su origen por seguir criterios de sostenibilidad en cuanto a la eficiencia energética y a la selección de materiales.
El edificio original fue diseñado y dirigido en colaboración por los estudios Adhoc msl y el del arquitecto Enrique Carbonell a finales de los años ‘90. El esquema general del edificio se resolvió con cuatro bloques de aulas y despachos con dirección este-oeste que se cruzan con dos piezas de comunicación perpendiculares, con dirección norte-sur.
Años más tarde, la Universidad de Murcia se plantea la ampliación de nuevas aulas que siguieran los criterios de espacio educativo definidos en la Declaración de Bolonia (flexibilidad organizativa, espacios más pequeños, menos alumnos por profesor, integración de nuevas tecnologías, etc). A estos criterios desde Ecoproyecta se sumaron los de construcción sostenible, para lograr un espacio sano, confortable y de menor requerimiento energético para su funcionamiento. Se eligen para su ubicación los porches que el edificio originalmente dejaba abiertos para conformar la plaza interna. Las aulas ocupan parcialmente esos porches, manteniendo la posibilidad de circular por la plaza y revitalizando el uso de la misma, ya que el acceso a las aulas se realiza desde ese espacio exterior, aprovechando el clima benigno de Murcia.
La intención ha sido que se entendiera esta ampliación como lo que era, un nuevo elemento que se añade a un edificio existente. Por tanto, lejos de mimetizar la solución constructiva de acero y hormigón que presenta la facultad, se ha resuelto, tanto formal como constructivamente, de manera independiente.
Las nuevas aulas siguen la filosofía de montaje ligero y en seco, con una estructura de madera laminada y paneles prefabricados de madera-cemento al exterior y de viruta prensada al interior. El aislamiento térmico se resuelve utilizando corcho natural y fibra de cáñamo. Estos tableros de corcho natural solucionan además las condiciones acústicas, tanto de aislamiento como de reverberación, necesarias para dotar de confort a las aulas.
La falta de inercia térmica al utilizar un sistema de construcción ligero se compensa con unos espesores de aislamiento importantes. En concreto cada fachada tiene 8 cm. de espesor de fibra de cáñamo y 4 cm. de corcho natural. Sumado esto a la capacidad aislante de los tableros de madera se consigue una muy baja conductividad térmica. De esta manera, gracias a la baja inercia y conductividad térmicas las aulas alcanzan su temperatura de confort rápidamente.
La ventilación y la iluminación se resuelven de manera sencilla aprovechando que las nuevas aulas dan al exterior en todo su perímetro, por lo que se abren unos huecos en las fachadas norte y sur para facilitar la ventilación cruzada y la iluminación natural perpendicular a la dirección de trabajo. Estos huecos se materializan con unas claraboyas que dan la imagen característica al proyecto.