"La Biblioteca del Congreso de calle Catedral es la puerta de entrada a una biblioteca parlamentaria donde ocurrirán acciones y eventos en espacios adecuados para vivir experiencias de aprendizaje y comunicación, que permitan reconocer la identidad político-cultural chilena desde sus instituciones, su territorio, su población, y su historia política y cívica."
Anteriormente les presentamos el proyecto ganador del concurso, y en esta oportunidad les mostramos el proyecto de Rodrigo Aguilar, Giulio Di Giuseppe, Rodrigo Fernández, Felipe Giannini y Ignacio Gonzales, quienes obtuvieron una mención honrosa.
“La intervención como operación estética es la propuesta imaginativa y libre por la que se intenta no sólo reconocer las estructuras significativas del material histórico existente, sino también utilizarlas como pauta analógica del nuevo artefacto edificado” Ignasi de Solá-Morales El proyecto para la habilitación del nuevo edificio de la Biblioteca del Congreso Nacional, emplazado en un edificio existente que data del año 1924, realizado por el Arquitecto Manuel Cifuentes y declarado como Inmueble de Conservación Histórica, ofrece la oportunidad de poner a prueba algunas hipótesis asociadas al modo en que algunas arquitecturas con valor intrínseco dado por el paso del tiempo, pueden recuperarse para volver a alojar nuevos usos acordes al contexto que exige la vida contemporánea. En este sentido, la nueva labor para la cual será destinada esta construcción, definida como la Biblioteca del Congreso Nacional, exige una serie de modificaciones y posibles adaptaciones que van ligadas a exigencias espaciales, aspectos medioambientales, requerimientos de uso y ámbitos de significación, que parecen ineludibles para ajustar la arquitectura existente a los estándares actuales.
La pregunta más relevante que surge de esta constatación es sobre la justa medida de actualización de una vieja piel para dar vida a nuevas ceremonias y como establecer un contrapunto entre las distintas capas de historia que han ido revistiendo el edificio en armonía con una intervención que devele un reajuste acorde al tiempo. Desde esta perspectiva, y en concordancia con lo planteado por Ignasi de Solá-Morales, podemos sostener que a partir de delicadas operaciones de cortes, suturas y encajes, es susceptible de lograr una ecuación que ponga de manifiesto los valores históricos del edificio y a la vez, actualice sus contenidos. Por otra parte, y desde el punto de vista del programa a albergar, las características de uso del edificio, como Biblioteca de una organismo fundamental para la vida cívica de nuestro país, constituye una oportunidad para cruzar y entrelazar la vida de los ciudadanos y las instituciones que los rigen.
ESTRATEGIAS DE DISEÑO De acuerdo a las consideraciones antes señaladas, el proyecto establece tres estrategias de diseño. La primera de ellas asociada a la conservación de los valores del edificio, la segunda ligada a la reconfiguración espacial interior y a su acondicionamiento ambiental, y la tercera enlazada a la percepción de la contribución actual. La primera estrategia parte de la comprensión y consciencia sobre la intervención del edificio histórico y sus atributos estéticos y urbanos. De esta forma, se considera relevante conservar la estructura, organización, volumetría y fachadas del edificio, ya no como una restitución artificial de su estado inicial, sino agregando el valor del paso del tiempo asociado a la materia.
La segunda decisión estratégica se materializa en la vocación programática del edificio y su carácter de relación con la ciudadanía. Desde esta perspectiva, la organización interior de la Biblioteca girará en torno a un vacío central que adopta la forma de una escalera limitada por los anaqueles de los libros que dan sentido a la vocación de la obra. Se intenta así -a partir del cuidado vaciamiento de las losas centrales del inmueble-, constituir un espacio de encuentro social entre el público general y la institución del Congreso Nacional en torno a los documentos y colecciones bibliográficas de libre acceso.
Finalmente, la tercera estrategia, asociada a la huella contemporánea sobre lo existente, permite -mediante la habilitación de una nueva planta superior-, la generación de un volumen delicadamente retranqueado de los bordes del edificio, que es entendido como una quinta fachada de observación del entorno cercano, focalizando intencionadamente las vistas sobre el edificio del ex Congreso Nacional.
ASPECTOS DE USO El programa general de la nueva Biblioteca del Congreso Nacional se organizará estratificadamente en niveles. La primer planta estará destinada a los espacios de carácter más público, como espacios de acceso, auditorio y salas de conferencias. El segundo y tercer nivel, enlazados a través de la escalera central y los anaqueles de la colección general, estarán destinado a los espacios propios de la biblioteca y salas de lectura. El cuarto y quinto nivel estarán destinados a oficinas, y la terraza se destinará a una cafetería y zonas de expansión. Finalmente, el nivel subterráneo estará destinado a los depósitos de libros y documentos de acceso restringido. Se considera la mantención de los dos sistemas verticales de circulación.
MATERIALIDAD La materialidad del proyecto propone un contrapunto entre lo existente y lo nuevo. Los pisos se consideran en mármol travertino en áreas públicas, y los cielos se configurarán a partir de paneles modulares. Para el área de terraza, se considera la reposición de la estructura de cubiertas por una losa con un refuerzo de aislación y la instalación de una capa vegetal que servirá como jardín, con el objeto de proteger la sobreexposición de calor de los pisos superiores. La cafetería se configurará como un volumen acristalado protegido por una piel exterior en base a una serie de pilares y machones de Hormigón Armado a la vista.
Arquitectos
Felipe Giannini, Giulio Di Giuseppe, Ignacio Gonzales, Rodrigo Aguilar, Rodrigo FernándezUbicación
ChileColaborador
Sebastián CruzAño Proyecto
2012Fotografías
Courtesy of Aguilar + Giuseppe + Fernández + Giannini + Gonzales