Arquitectos: Atelier d’Architecture Brenac & González Ubicación: Quai du Lot, 75019 Paris, Francia Año Proyecto: 2007-2012 Fotografías: Sergio Grazia
Área Proyecto: 4432.0 m2 Equipo De Proyecto: Jean-Pierre Leveque, Arnaud Negre, Sebastien Pichery, Stefan Tuchila
El diseño del jardín infantil y la escuela primaria juntas, le dio la oportunidad a los arquitectos de lograr un alto grado de flexibilidad funcional y práctica. El proyecto establece un sentido de continuidad, pero también de separación, organizado para los niños de diferentes edades, con sus diferentes niveles de energía y habilidades motoras.
El terreno forma parte de la zona de desarrollo Claude Bernard prioridad developomen (ZAC), entre la carretera de circunvalación de París y el boulevar McDonald. A pesar de la superficie de la parcela, su ubicación cerca del canal ofrece un potencial poético muy interesante. De esta manera los niños puedan beneficiarse plenamente de la ubicación y disfrutar de las vistas, generando dos fachadas, una orientada al norte, la otra orientada al sur. A lo largo del boulevar de McDonald, un volumen de tres plantas forma una pantalla que protege el patio de recreo, reduce la contaminación acústica y proporciona una sensación de profundidad al ponerse de pie en el patio delantero y mirar a través del hall de acceso. En el lado sur hay un bloque inferior adyacente a las oficinas que mira hacia el interior.
Para entregar la mejor respuesta posible al problema de convivencia entre la escuela primaria y el jardín infantil, se les separó en dos corrientes que comienzan en el hall de acceso; los alumnos jóvenes entran directamente en una galería cubierta, mientras que los niños entran guiados por sus padres. Las salas de clase, todas en el ala este, forman una especie de bloque en suspensión: el jardín infantil está en el primer piso y los alumnos más grandes en el segundo. Los más chicos tienen acceso directo al patio a través de una escalera en el lado norte, lo que evita tener que cruzar la zona de recreo de la escuela. Esta disposición hizo posible la creación de dos zonas de juegos que hacen el uso máximo de la superficie disponible, y dos galerías cubiertas, lo que genera una sensación de apertura y transparencia, con vistas al paisaje. Las áreas comunes, como restaurantes, oficinas y salas de juego se dispusieron en cada extremo.
A pesar de su similitud externa, la propuesta busca poner en relieve simbólicamente la transición del jardín a la educación primaria, no sólo a través de un cambio de piso, sino al diferenciar e identificar claramente los dos niveles y la forma en que los alumnos diferentes se mueven a través del edificio. Las aulas de las escuelas infantiles se enfrentan el canal con el fin de reducir el ruido del patio del recreo, el movimiento se dirige hacia el interior. Lo contrario pasa en el caso de los alumnos más grandes: cambian además los puntos de vista.
Para reforzar el sentido de unidad y evitar un problema de “composición” de la fachada, se ha optado por una unidad de diseño que reúne a todas las funciones del edificio y secciones. El esquema general cuenta con una sola piel continua de vidrio traslúcido impreso con un patrón de círculos.
Esta piel transparente envuelve todo el edificio, borrando la más mínima sugerencia de las ventanas en el interior. En algunos casos, impresa por ambos lados, este muro cortina ventilado revela, sugiere u oculta los colores y la luz detrás de él. En las zonas de circulación, el vestíbulo de entrada y la galería cubierta alrededor del patio de recreo, la superficie translúcida filtra la luz solar y crea un patrón de círculos proyectados en el piso y las muros que se mueve con el sol. Esta envoltura de vidrio, tan sensible a la luz variable, captura cada movimiento de la reflexión, cada matiz, cada chispa, su esquema cambia constantemente, y a veces incluso se desvanece.
El hall de entrada se trata como una zona de intercambio de flujos en el que destacan las escaleras de formas extrañas que ocupan y cruzan el espacio vacío. El atrio de tres pisos, aclara la forma en que funciona el programa del edificio en su conjunto y muestra cómo las diferentes secciones se han superpuesto. La monumentalidad de la sala de acceso contrasta con las otras áreas, se hace hincapié en el movimiento y las perspectivas cruzadas que le dan al diseño una fuerza narrativa lúdica.