- Área: 200 m²
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Fotografías:Denílson Machado
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Diseñada por el Studio Guilherme Torres y ubicada en Londrina, Brasil, esta casa parece flotar en el aire a través de un gran volumen principal que cubre una gran luz sin pilares.
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La idea del voladizo surgió a partir de un desnivel de casi 3 metros, reservando el espacio inferior para la zona de ocio. "He acoplado la casa en la ladera", dice el arquitecto Guilherme Torres, "Al hacer eso, he liberado el espacio para disponer el jardín, la piscina y las salas de estar".
El relieve irregular es ganado a través de un bloque monumental de hormigón pretensado que contiene cables de acero de alta resistencia dentro de la misma losa. Esta característica permitió cubrir una luz de 17.5 metros de largo, además de 4.5 metros más allá del muro que limita la zona de la terraza.
Suspendido y sin pilares, la construcción aporta formas rectas, puras y simples. En contraste con el blanco de la albañilería, se usaron revestimientos de madera y piedra, haciendo más calido el espacio sin romper con el toque contemporáneo de la propuesta. "Estos materiales aportan una cuota de rusticidad y calidez", dice el autor.
Las dos plantas que configuran la casa funcion de manera independiente. La vida "diaria" de la familia se concentra en la planta superior, donde se distribuyen las habitaciones, la cocina, un salón-comedor y todos los accesos a través de una rampa lateral, además de un garage en la parte superior. El área más pública se ubica en la planta baja; una zona de ocio amplia y cómoda, con piscina, jardín, quincho y dos salones amplios.
El proyecto considera la utilización de mano de obra local y materiales sencillos. Piedra, hormigón visto y mampostería blanca son los elementos que definen la volumetría general.
El proyecto usa la captación de agua de lluvia para su reutilización y un sistema de calefacción solar para las duchas y la piscina. La casa fue diseñada teniendo en cuenta la orientación solar y el perfil natural del terreno. Para mantener la privacidad sin renunciar a las vistas, todo el bloque de habitaciones se cierra a través de persianas de madera, permitiendo permanecer con las ventanas abiertas y tener ventilación cruzada permanente.