- Área: 67 m²
- Año: 2008
-
Fotografías:Daici Ano
-
Proveedores: Casa Rosselló
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El sitio se ubica en un tranquilo barrio residencial sobre una loma en Yokohama. Las casas vecinas están alineadas y muy cercas unas de otras, y el sitio tiene forma de bandera, con una llegada de 3m de ancho a la calle. Dado que el sitio se orienta hacia el norte, y que la casa vecina hacia el sur tiene 2 pisos y está en un punto más alto del terreno, se hacía casi imposible la entrada de luz desde el sur (hemisferio norte). El cliente, un matrimonio que vive hace un tiempo en el lugar, quería una casa pequeña pero luminosa, de tan solo un piso, para cuando los hijos se independizaran de la pareja.
El techo, con forma de "picorocos", permite la entrada de luz a través del vidrio en el extremo de estos tubos, dispuesto de manera tal que evitan la sombra y vistas de los vecinos. Estos tubos se expresan hacia el interior, dónde el interior de los planos plegados separa los espacios interiores.
Al ser una casa de un piso pudimos tener completa libertad sobre la forma de la cubierta. Tomando ventaja de esta libertad, intentamos hacer que el interior y el exterior aparecieran como los dos lados de un mismo objeto.
A pesar de que el área interior principal es de aproximadamente 7.5 x 7.5 metros, tratamos de dar la mayor distancia de separación entre las áreas de comida, guardar ropa y habitar, a través de los pliegues interiores de la cubierta y de la altura de cada espacio. Los pliegues altos conectan espacios, mientras que los pliegues bajos los separan, como por ejemplo entre el dormitorio y el living. En el punto con la mayor altura de piso a cielo se encuentra un objeto macizo de madera, dentro del cual se encuentra la cocina y baño. Sobre este hay una pequeña oficina para el hijo diseñador, una especie de loft. Este y otros espacios están visualmente separados, pero los miembros de la familia pueden sentir la presencia del resto cuando están dentro de la casa.
Decidimos usar concreto armado, y tratamos de hacerlo de la manera más racional. Al darle al techo una estructura de placas plegadas, pudimos lograr un interior sin pilares. Al contrario de la apariencia exterior del concreto, los espacios interiores están pintados de blanco, lo que les da una terminación brillante y homogenea. El piso y los muebles en obra están hechos de madera compuesta con una terminación pintada. Así, los muebles contrastan con los muros blancos y se leen como saliendo del suelo.
El techo no solo permite la entrada de luz y protección del exterior, además permite la separación sutil de los espacios. El brillo y la suavidad de la luz varía de acuerdo a las estaciones del año y la hora del día, lo que hace cambiar las vistas interiores. Las ventanas de los tragaluces se recortan contra el cielo y proyectan los cambios de la naturaleza exterior.