Las renovaciones urbanas generalmente implican grandes demoliciones, que resultan en la desaparición de la identidad histórica local y generan una enorme cantidad de residuos junto al transporte de nuevos materiales para la construcción. Algunos proyectos, sin embargo, aportan nuevos horizontes y muestran diferentes posibilidades. Este es el caso de LAPI, abreviatura de "Largo" y "Pinheiros", un ejemplo de ocupación y recalificación urbana que respeta la identidad local y promueve una nueva experiencia de ocupación repensando el espacio urbano a partir de sus preexistencias. Con una arquitectura de SuperLimão y masterplan de Spol, el proyecto ocupa un área de 20.000 m² y abarca 29 propiedades distribuidas en tres manzanas en un barrio tradicional de la Zona Oeste de São Paulo, punto estratégico de intersección con las principales vías de la ciudad, por donde circulan miles de personas diariamente. Conversamos con Thiago Rodrigues, arquitecto y socio de la firma, sobre los desafíos y oportunidades de trabajar en un proyecto de este tipo.
La belleza artesanal del palillaje: resistencia, estética y control solar en fachadas
Existen ciertos materiales que ofrecen múltiples formas de uso, y uno de ellos es la madera. Este material noble puede adoptar diversos roles: en la tectónica como elemento estructural, en los acabados como revestimiento de pisos, o incluso como elemento funcional y decorativo en forma de mobiliario. Dependiendo de su aplicación, la madera adquiere una narrativa distinta. En el diseño de fachadas, su integración otorga un carácter particular, ya que, además de contribuir a la identidad y estética del edificio, también desempeña un papel crucial en su funcionalidad.
Diseñar en conexión con la naturaleza: una entrevista con Tom Bassett-Dilley sobre arquitectura sostenible y saludable
Cuando abordamos los problemas más amplios del mundo (como la emergencia climática, la crisis energética y la escasez de viviendas), a menudo buscamos soluciones radicales y grandiosas que puedan abordarlos todos a la vez. Por muy atractivas que puedan ser estas ideas, eventualmente se topan con las miles de complejidades e interconexiones que presenta nuestro mundo. Pero ¿y si buscamos soluciones más descentralizadas y domésticas? La firma Tom Bassett-Dilley Architects, con sede en Chicago, ha estado persiguiendo precisamente esto, enfocándose en diseño sustentable, proyectos libres de carbono y energéticamente eficientes para residencias, edificios históricos, instituciones y proyectos comerciales. En su Manifiesto: The New American Dwelling, sostienen que la vivienda unifamiliar, que alguna vez fue el gran sueño americano, debe redefinirse para enfatizar el minimalismo, la eficiencia, la salud, la conexión con la naturaleza, la durabilidad y la bondad personal, alejándose de las prácticas derrochadoras, artificiales y tóxicas. Hablamos con Tom Bassett-Dilley, FAIA, CPHC, LFA y fundador de la firma, sobre algunos aspectos de su trabajo.
8 proyectos con fachadas sostenibles y contemporáneas de pizarra natural
La pizarra es una roca natural metamórfica compuesta por minerales arcillosos como la mica y la clorita, que le confieren una textura laminada y tonos predominantes de grises, negros y verdes. Ampliamente utilizada en la industria de la construcción, se caracteriza por su durabilidad y elegancia distintiva, ofreciendo un acabado sobrio y atemporal para techos y paredes exteriores. Debido a su textura única, puede transformar el aspecto de cualquier estructura utilizando piezas rectangulares o de otras formas. Además, es un material altamente resistente a la intemperie, al fuego y a los contaminantes ambientales, lo que garantiza un rendimiento a largo plazo con un mínimo mantenimiento. Su proceso de producción ecológico, que implica únicamente la extracción de materia prima y un procesamiento mínimo, reduce las emisiones de CO₂, convirtiéndola en una opción ideal para la arquitectura contemporánea sostenible.
Aprovechar la masa térmica para una vida sostenible: 4 proyectos residenciales en los desiertos de Estados Unidos
La masa térmica es la capacidad de un material para absorber, almacenar y liberar calor. Este concepto, utilizado para moderar las temperaturas de los edificios reduciendo las fluctuaciones, es crucial para mejorar la eficiencia energética. Los materiales con una masa térmica relativamente alta, como la piedra, el hormigón, la tierra apisonada y el ladrillo, pueden absorber una cantidad significativa de calor durante el día y liberarlo lentamente cuando las temperaturas disminuyen por la noche, reduciendo la necesidad de sistemas de calefacción y refrigeración. Propiedades como la capacidad calorífica, la conductividad térmica y la densidad se consideran al evaluar la masa térmica de un material.
Gravilla de ladrillo: un nuevo material para crear jardines de bajo consumo hídrico
Cubrir el suelo de los jardines es esencial por varias razones. Ayuda a conservar la humedad del suelo, reduciendo la necesidad de riego frecuente, y controla el crecimiento de las malezas al bloquear la luz solar necesaria para que germinen. También ayuda a regular la temperatura de la tierra, manteniéndola más caliente en invierno y más fresca en verano, y evita la erosión causada por el viento y la lluvia. Además, reduce la compactación del suelo, facilita el crecimiento de las raíces, mejora la infiltración del agua y entrega un acabado estético al jardín.
Explorando el uso inteligente del ladrillo a través del caso de la Residencia Thai
El ladrillo es uno de los materiales más antiguos y versátiles en la construcción, extendiéndose más allá de los simples muros de mampostería. Sus orígenes se remontan al 7500 a.C., apareciendo ejemplos cocidos en hornos hacia el 3000 a.C., lo que supone un avance tecnológico hacia construcciones más resistentes. Se extendieron por Europa y Asia alrededor del año 1200 a. C. y reemplazaron materiales como la madera y la piedra en regiones escasas. Los ladrillos romanos, que destacaban por su forma alargada, fueron muy utilizados en la construcción de sus ciudades y aún sobreviven en la actualidad. La historia del ladrillo está entrelazada con la de las civilizaciones, siendo un material fácil de producir, resistente y versátil, permitiendo multitud de aplicaciones y consiguiendo resultados impresionantes e inusuales.