Existen lugares donde la relación entre hombre y naturaleza ha sido históricamente tan cercana que a veces se torna difícil valorar cada parte como independiente. Es en este punto cuando nace una importancia por exaltar aquellas cosas que han forjado el camino y el vivir del hombre. No es suficiente con que el espacio de la naturaleza este presente únicamente en la naturaleza. Hoy esta preocupación trasciende a edificios que honran y enaltecen el valor de las plantas y demás seres vivos para el hombre, su sociedad y su cultura.
Estas cinco obras colombianas son el medio dedicado a la convivencia entre las personas y el mundo natural. Pero, no basta con llevar el bosque a casa. Acá el objetivo es que la arquitectura juegue de mediadora entre la vida recreativa, las tradiciones culturales, la conciencia de la gente por el medio ambiente y su importancia para la vida humana.