Michael Mehaffy & Nikos Salingaros

EXPLORA AQUÍ LOS ARTÍCULOS DE ESTE AUTOR

La arquitectura moderna imperialista ataca de nuevo

Imagínese el siguiente escenario. Es 1902, y ante la gran sorpresa y desolación de los ciudadanos de Venecia, la hermosa torre de la campanilla de su Plaza de San Marco colapsa. Esa misma tarde, el consejo comunal de la ciudad vota aprobando 500,000 Liras para su pronta reconstrucción “com’era, dov’era” — “como era, donde estaba”. Ambos, los residentes del futuro y los visitantes podrán continuar disfrutando de esta hermosa estructura, misma que ha sido restaurada y ampliada muchas veces en el pasado.

Pero de repente una autoridad desde un lugar lejano exige: “¡Las nuevas regulaciones no permiten esto! Nuestras políticas de financiación requieren que “todo proyecto debe utilizar un diseño contemporáneo”, ya sólo se pueden utilizar estilos aprobados vanguardistas, y ya no pueden utilizar los estilos locales tradicionales de Venecia. Restaurar fielmente sería “falsificar la historia”, es “mezclar lo falso con lo genuino”, y ¡decretamos que esto genera consecuencias desastrosas!” Entonces el proyecto no se repara como era y algo completamente “contemporáneo” se construye en su lugar.

Por qué la arquitectura verde pocas veces merece su nombre

Por qué la arquitectura verde pocas veces merece su nombre - Image 2 of 4
7 World Trade Center / SOM. Image © Ruggero Vanni.

El siguiente artículo, escrito por Michael Mehaffy & Nikos Salingaros, apareció originalmente Metropolis Mag como "Why Green Often Isn't".

Algo extraño está pasando con muchos de los llamados “edificios sostenibles". Cuando se hacen las evaluaciones post-ocupación, estos demuestran ser mucho menos sostenibles de lo que sus defensores afirmaban. En algunos casos, incluso han desempeñado un peor papel que los edificios más antiguos de la ciudad. El artículo del 2009 del New York Times, “Algunos edificios no cumplen con su etiqueta verde”, documenta los extensos problemas registrados en muchos de los grandes iconos de la sostenibilidad en Nueva York. Entre otras razones, el New York Times señala que el uso generalizado del muro cortina y las plantas profundas -que disponen el espacio habitable lejos de los muros exteriores-, obliga a una mayor dependencia de los sistemas de ventilación y luz artificial.

En parte como respuesta a la prensa, la Ciudad de Nueva York estableció una nueva ley que exige la divulgación de los resultados reales de muchos edificios. Eso llevó a la aparición de informes que registraron rendimientos incluso aún más bajos. Un artículo reciente del NYT, [“La ley de seguimiento del rendimiento energético de la ciudad revela algunas sorpresas”] señaló que el nuevo y reluciente World Trade Center 7 -LEED Oro-, obtuvo una calificación Energy Star de apenas 74, un punto por debajo del mínimo de 75 para "edificios de alta eficiencia" en el marco del sistema de clasificación nacional.

¿Qué está pasando realmente con estos edificios supuestamente sustentables? Sigue leyendo, después del salto...