Guadalupe Marín con sus hijas, Ruth, a la izquierda, y Guadalupe,1939. Foto vía Un día, una arquitecta. Image Cortesía de coolhuntermx
Escribir sobre la participación de las mujeres arquitectas o en ámbitos de construcción es complejo; hoy en día sabemos de arquitectas contemporáneas multi-premiadas y reconocidas. Sin embargo, mirar al pasado hace de esa perspectiva un espacio oscuro y solitario.
Hablar de México es hablar de sus regiones, costumbres y por supuesto de su comida. Nuestra herencia culinaria se remonta a Mesoamérica, a la domesticación del maíz, el chile y el frijol. Sin embargo, también esta presente el simbolismo alrededor del fuego y las reuniones que conlleva. El entorno de la cocina se vuelve protagonista en las historias y convivencias familiares, los quehaceres domésticos y las verbenas; porque hacer comida es necesidad básica pero también es deleite a la hora de festejar. La cocina es un objeto en sí mismo. Es también un repositorio de otros objetos, un sistema creativo que se adapta a sus ocupantes y colabora en los trabajos del cuidado alimenticio en hospitales, escuelas, empresas y hogares. De ahí partimos a estilos: moderno, contemporáneo, tradicional, minimalista, rústico y un largo etcétera, cuya historia resumiré en dos entregas.